Morelos a 208 años de su ejecución
José Ma. Morelos y Pavón fue ejecutado por los ejércitos realistas el 22 de diciembre de1815.
Con su muerte concluye la segunda etapa de la insurgencia, la ideológica, la que dio forma política y jurídica a la revolución iniciada por Hidalgo en 1810.
Para el rey Fernando VII era el más peligroso de los revolucionarios pues dio identidad al movimiento, de ahí que intentaran a toda costa eliminarlo del escenario.
El 14 de septiembre de 1813 se instala en Congreso Constituyente de Anáhuac o de Chilpancingo en el cual se redactará la primera Constitución elaborada por mexicanos para la nación en ciernes y que será conocida como de Apatzingán por signarse el 22 de octubre de 1814 en ese poblado.
La persecución de los realistas fue sin tregua, los constituyentes vivían a salto de mata.
Junto a ello, las intrigas internas de los revolucionarios quienes temían a la fuerza militar y al pensamiento democrático de José Ma. Morelos, por lo que rehuían verse con él mientras escapaban.
Destituido del poder ejecutivo, asume la diputación como constituyente entre febrero y marzo de 1814 cuando se amplía el número de diputados, en ese momento Morelos es designado como legislador por el Nuevo Reino de León, el primer diputado constituyente de la entidad.
Frente a la inquisición reconoce que no aporta mucho al texto constitucional y que ésta no era a su gusto, pues entre otras cosas, planteaba un gobierno parlamentario y él lo veía presidencialista.
Al firmar la Carta Magna, los constituyentes abandonan Apatzingán por el asedio realista, Morelos sirve de señuelo para proteger a los demás constituyentes en su huida. Finalmente, y ante la negativa de brindarle socorro por parte de los otros caudillos como Nicolás Bravo o Vicente Guerrero, cede al embate del teniente coronel Manuel de la Concha y cae preso el 5 de noviembre de 1815 como consecuencia del quebranto armamentístico y físico de su ejército.
Es víctima de un juicio sumario en donde resulta culpable de traición a la patria como se lee en la notificación de Concha del 21 de diciembre de 1815. “Pasó [Manuel de la Concha] con asistencia de mi secretario a la prisión donde se halla José María Morelos, reo en esta causa a efecto de notificársela, y habiéndolo hecho poner de rodillas le leí la sentencia de ser pasado por las armas por la espalda como traidor al rey…”.
La notificación se da un día antes de la ejecución y un día posterior al que Félix Calleja redactara la sentencia. Les urgía acabar con el caudillo que conjuntaba pensamiento filosófico-jurídico, intuición política y estrategia militar en su persona. Pensaban que al morir aniquilaban el movimiento; sí lo debilitaron, pero no lo acabaron; continuaría la lucha gracias a Nicolás Bravo, Vicente Guerrero, Guadalupe Victoria y más tarde con el arribo de Fray Servando Teresa de Mier y Xavier Mina.
El cumplimiento de la sentencia se da a las tres de la tarde del 22 de diciembre de ese año. Manuel de la Concha detalla en el parte que fusiló por la espalda al líder insurgente, esto en presencia de la sección a su mando y la guarnición destacada en el sitio.
Describe en el parte que el insurgente fue acompañado por el Padre capellán de la sección desde la prisión hasta el sitio de la ejecución, además le proporcionó “al cura de este pueblo, y su vicario, quienes lo asistieron desde tres horas antes de su muerte…”.
A las cuatro de la tarde fue sepultado en la parroquia del pueblo.
Con la muerte de Morelos termina una etapa de la insurgencia, pero comienza una página en la historia nacional.