LOS NÚMEROS fríos nos dicen que la política de abrazos en vez de balazos, no disminuye la violencia ni el crimen en México, donde un día sí, y otro también, suenan las armas y crece la inseguridad.
Pero, tampoco parece ser eficiente la política de endurecer el combate a los criminales con artillería pesada, como ocurre con Nuevo León, que adquirió vehículos blindados y artillados y hasta un helicóptero de guerra y con policías armados con equipo militar...
DESDE QUE arrancó este gobierno, no han bajado los atentados mortales.
En lo que va del año se cuentan 576 asesinados, que se acerca al número de 788 muertos violentamente, en 2012, cuando a instancias de los grandes empresarios de Monterrey, en tiempos del gobernador Rodrigo Medina, se decidió crear una nueva policía estatal: Fuerza Civil y con la ayuda del ejército, disminuir hasta el número de 166 asesinados en 2015.
Los primeros años del gobierno de El Bronco, los números se mantuvieron estable en alrededor de 270 promedio por año, para luego empezar a subir a casi el doble al final del sexenio, pero nada comparado a los primeros años del gobierno de Samuel García: 541 en 2022; 545 en 2023 y de enero al 19 de mayo de este año, 576 asesinados violentamente...
DICE EL gobierno federal que es el periodo en que más homicidios se han cometido en el estado en los últimos 11 años. La cifra contrasta con los homicidios registrados en el mismo periodo del año pasado:
- Al inicio de la pandemia, durante los primeros 139 días de ese año hubo 404 homicidios, y en el 2019 fueron 423 durante el mismo periodo.
- En 2024 llevamos 576, el segundo más violento, superado solamente por el 2012.
Pero no es un tema del gobierno, aunque Samuel García ha presumido inversiones récord en seguridad, como la compra de unidades blindadas conocidas como "Black Mamba" y hasta un helicóptero Black Hawk...
