Les platico:
El peor error que cometió Jesús Nava, alcalde de Santa Catarina de Tesla, fue traicionar a sus mentores del PAN para chapulinear al bando de las naranjas podridas, que mangonean Mariana Rodríguez y su consorte Samuel García en NL.
Si me lo permiten, paso a explicarme. ¿Arre? ¡Arre!
Hay tiro
Cuando todo parecía indicar que el equipo naranja ganaría su primer “Super Bowl”, en el último “cuarto”, los números marcan empate técnico entre la alianza PRI, PAN, PRD y el MC para el relevo de la alcaldía de Santa Catarina.
Fueron muchas habladas de las naranjas podridas y del alcalde Nava en específico sobre su triunfo cantado anticipadamente.
Se ufanaban de llevar veinte puntos de ventaja en sus encuestas.
Pero en pleno domingo de Súper Bowl sale a la luz una nueva estimación que circula en ciertos medios locales:
Dice que si las elecciones ocurrieran hoy y los candidatos fueran Jesús Nava y Héctor Castillo, el 41% de los electores votaría por el primero y el 37% por el diputado federal panista Héctor Castillo.
De nada sirvieron los dos años que lleva el alcalde Nava gastando un dineral en redes sociales para tratar de denostar al PAN y a Héctor, su mentor político junto al diputado federal Víctor Pérez.
Los legisladores Castillo y Pérez ya fueron alcaldes de dicho municipio.
Si los números no mienten, el empate técnico que existe en estos momentos pone las cosas peliagudas y podrían mandar el juego a tiempos extras.
¿Por qué? En apenas 20 días de precampaña, Castillo está dándole la vuelta al marcador.
Y aprovechando los errores defensivos de las naranjas podridas, el panista se coló hasta las diagonales, emparejando de hecho el marcador.