Claudia, el palacio no es tuyo


El equivalente a los antiguos fosos de agua que rodeaban a los castillos medievales, ese aislamiento obsceno de un recinto público, que pertenece a todos los mexicanos, es una apropiación indebida.
Claudia Sheinbaum, el palacio no es tuyo.
No hay justificación alguna para cercarlo a la manera que hacen gobernantes como Vladimir Putin o Xi Jingpin en Moscú y Beijing, respectivamente, que se aíslan del contacto con los ciudadanos, especialmente con quienes muestran su desacuerdo o inconformidad.
¿A qué obedece la toma del Palacio Nacional por la fuerza policiaca? ¿Qué puede justificar que el edificio que simboliza la sede del poder central en México se convierta en una fortaleza inexpugnable?
¿Es esa la imagen de la Cuarta Transformación que desea transmitir Sheinbaum?
A partir de la mitad del mandato de Andrés Manuel López Obrador, empecé a albergar dudas sobre su estabilidad emocional, la fortaleza mental para soportar la carga de trabajo de la presidencia y la forma en que tomaba sus decisiones.





