¿Por qué suponen las personas y gente en la política, que pueden actuar o hablar sin sufrir consecuencias?
Utilizamos palabras para hacer preguntas, dar instrucciones y explicar cosas.
- Expresar aprobación y aprecio.
- También palabras para alentar a las personas o desafiarlas.
- Usamos palabras para comunicar desaprobación y decepción, exclusión e integración
- Usamos palabras para expresar lo que pensamos y lo que sentimos y con las palabras podemos crear o destruir.
Son más que sonidos, las palabras moldean la mente para después convertirse en pensamientos o acciones, son tan poderosas que a través de ellas podemos crear o destruir, por eso su correcto manejo es de suma importancia.
Las palabras tienen poder.
Su significado cristaliza percepciones que moldean nuestras creencias, impulsan nuestro comportamiento y en última instancia, crean nuestro mundo.
Su poder surge de nuestras respuestas emocionales cuando las leemos, las pronunciamos o las escuchamos.
Usamos palabras que nos permiten definir el mundo.
Desde el domingo fue usada tanto por los que cometieron el hecho y de quien lo toleró.
La palabra mágica “descuido”, (las palabras mágicas son aquellas que, por su carácter seductor y su uso repetitivo en los sistemas comunicación, comienzan a buscar su significado) y damos a conocer entre otros sus Sinónimos: descuido, Dejadez, desatención, indolencia, sordidez, desliz y descortesía.
- Las palabras son la esencia del ser humano y la forma en que se relaciona con la realidad.
- Son un instrumento de comunicación e interrelación social.
- Las palabras pueden sanar o herir, alentarnos o desanimarnos.
El descuido en política y en sus luchas por el poder, se da como una emoción hacia los demás, la cual puede generar en la persona descuidada la sensación de ser moralmente superior al otro.
Esta emoción puede sentirse hacia los demás por considerarlos menos válidos en cualquier aspecto, o por ejemplo en cuanto a inteligencia, audacia o fuerza, la cuales no tienen, pero si la podemos encontrar en los en otros sean superiores o no.