El “Desmadre” mundial de Trump


RMO:
“Buen día Juan Miguel, ¿Qué opinas de la primera semana del gobierno de Trump?
JMAS:
“Buen día Raúl, mi opinión es que hay un “Des-madre”, que siginfica; salir de matriz, de madre, del cauce. Ir sin medida o contención.
Conducir sin respeto; sin dignidad. Palabra descriptiva de lo que el 20 de enero comenzó, y escala a mundial.
Trump tomó, una vez más, el volante de la presidencia de Estados Unidos.
Y lleva de copilotos varios de los más ricos e insolidarios del mundo, como Elon Musk.
Resueltos a no contenerse ante consideración legal, ética, humanitaria alguna.
Viéndose el ombligo, egocéntricos; nacionalismo exacerbado, dosis de xenofobia; ultraderechas arrogantes.
RMO:
“Las amenazas de Trump, vertidas en su toma de posesión, fueron para sorprender o ¿cuál es tu versión?”
JMAS:
“Desde el primer momento amenazó a Canadá, México; Panamá, Groenlandia-Noruega; también a sus antiguos aliados de Europa.
Los ya nacidos jodidos del mundo, no importan.
Los migrantes desesperados buscando oportunidades de vida digna, al carajo.
Se habla de un “nuevo orden mundial”, pero lo que se ve es solo inicio de destrucción del “orden” que se reconfiguró a la caída del muro de Berlín y del bloque soviético.
El mundo es su botín.
Y anuncian que van por Marte para sí mismos”.

RMO:
“Estimas que ya no habrá orden social”
JMAS:
“El orden social, para serlo, debe ser un orden de justicia, de dimensión ética: que dé a cada uno lo suyo, incluyendo al bien común -familiar, empresarial, nacional o internacional-.
Por experiencia, todos inter dependemos desde casa, barrio, ciudad, país.
En círculos concéntricos.
Los países inter dependen de hecho.
Y como deber moral y jurídico, de ser internacionalmente solidarios para el bien, la supervivencia y el progreso.
“El bien común del género humano es valor determinante, razón de ser y justificación de la vida internacional.
El conjunto de condiciones supranacionales estáticas y dinámicas, de orden político, económico, social y cultural, que permiten y favorecen el desarrollo de los países y de sus elementos personales y sociales es el bien común de la humanidad”.
RMO:
“Eso quiere decir que, dentro del gobierno de Trump, no hay prudencia, ni tolerancia”.
JMAS:
“Trump y compinches olvidan que todos quienes conforman el género humano son de la misma naturaleza.
Que es igual, para todos, el conjunto de medios para la supervivencia y el progreso; tienen las mismas necesidades básicas, y son titulares de los mismos derechos humanos fundamentales.
No se vale desconocer la existencia de factores de conflicto y destrucción en la naturaleza de los seres humanos; ello genera esperanzas falsas que conducen a regímenes totalitarios.




