Con Todos Menos Contigo - Anyone but You / EUA, 2023
Con Todos Menos Contigo es una comedia romántica donde Bea (Sydney Sweeney) tiene que aparentar ser novia de Ben (Glen Powell) para que la boda entre Claudia y Halle en Australia, salga al pie de la letra.
La comedia romántica, a como es montada, es una especie de adaptación muy muy alejada de Mucho Ruido a Pocas Nueces (Much to do About Nothing) del maestro William Shakespeare, ofreciendo el arreglo entre partes para aparentar lo que no se es y los chismes que se propagan para presionar a que todo salga bien entre ellos.
Caray, la comedia tiene ganas de hacer reír, pero a como la trabaja el director Will Gluck, la coloca en pantalla como una “comedia” cuidada, demasiado mecánica, con cada chiste calculado para “hacer reir”, tener cuidado de “no ofender” y con el gran pecado que no hay química entre la Sweeney y Powell.
Los montajes cómicos, que sí los hay, causan risas forzadas, esporádicas, a veces está uno en duda si debe reírse o llorar por los personajes por lo mal que son colocados durante el recorrido de la historia.
En cierto sentido, se siente extraño que se cuidó con demasiado esmero la inclusión al estilo Hollywood; pero por otro lado, la boquita de los personajes requiere de un severo lavado con jabón Zote, porque hablan feo... ya se establece que la comedia es para adultos.
No estoy exigiendo diálogos profundos y filosóficos, pero la verdad quieren establecer una comedia para adultos que no tiene el peso específico de lo que presume ser, pero que ni puede aplicar la receta de cocina de una película romántica de parejas.
Y obvio, todo desemboca en un clímax malo, forzado y totalmente desangelado.
Con Todos Menos Contigo: triste, pero aquí la receta construida para que opere tipo “la puedes ver mil veces e igual va a jalar mil veces” funciona con todos menos con este churro y párenle de contar.