El amor no sirve de nada

EL AMOR NO SIRVE DE NADA…

• Si no lo dices, o si no eres sincero,
• Si no lo demuestras sin que te lo pidan, o sin que lo esperen de ti,
• Si no te impulsa a hacer sentir bien a quien dices amar,
• Si no haces nada por quien amas, cuando ves que lo necesita, te lo pida o no,
• Si te escudas en decir que amas, para pedir que te quieran como dices querer,
• Si lo condicionas a que te den cosas, materiales o no materiales,
• Si lo condicionas a que te amen de misma manera que dices amar,
• Si, en fin, no eres congruente entre lo que dices sentir, y lo que haces sentir.

Así, de nada sirve el amor...

• El amor solo sirve si lo demuestras con hechos.
• Porque el amor es acción. 
• Para hacer sentir amor a alguien hay que mostrarlo y demostrarlo, hay que vivirlo, transmitirlo y contagiarlo, pero sobre todo hay que sentirlo sin pensarlo... 
• Hay que darlo sin escatimarlo. 

Para que sirva el amor...

• Porque cuando tu alma siente que ama, se lo hace sentir a quien amas
• en una mirada, en un gesto, en un beso en cualquier parte de su ser, 
• en la mano, en el rostro, en los labios, en su cabeza, en un guiño, en un abrazo, 
• en una caricia, en un mensaje, en una provocación… 
• en las cosas que se notan y estremecen el alma de quien las recibe.

Y que le hacen sentir el amor...

• Si no es así, el amor sale como agua turbia del corazón, 
• y lo que pudo ser agua pura y clara, sabe a agua rara. Sabe mal, y no te llena…
• Claro, el amor necesita reciprocidad para regarlo. 
• Si no te lo corresponden a pesar de lo das, se desgasta hasta desparecer. 
• Porque en esta vida todos esperamos recibir algo a cambio de lo que damos.
• Claro, salvo el amor más puro que es el amor a los padres y a los hijos, 
• que tienen un lugar especial en el universo.

Un amor que no se piensa, que solo brota..

• A veces el amor se adormila por el tiempo de no demostrarlo, 
• por decepciones mutuas, por cansarse de darlo sin recibir, por darlo por sentado. 
• Así el amor lo encierras en tu corazón y no lo dejas salir, o te vuelves selectivo. 
• El rencor es el mayor enemigo del amor, y el que lo sigue es el silencio. 

Si no lo despiertas, lo dejarás ir para siempre.

Haz que sirva tu amor. 

• Es un privilegio tener a quién amar. 
• Siéntelo, demuéstralo, gánatelo, 
• y hazlo florecer en tu corazón y en el corazón de quién amas.

Y TU VIDA SERÁ ETERNA, EN OTRO CORAZÓN.