La guía definitiva para elegir el vino perfecto esta temporada
Por eso, esta semana quiero compartirte una pequeña guía práctica de vinos para estas semanas: blancos con personalidad, tintos para compartir sin miedo y espumosos que hacen que cualquier reunión se sienta más celebración.
Además, te dejo etiquetas que personalmente recomiendo y que puedes encontrar fácilmente en Monterrey.
1. Blancos con carácter (y uno que otro toque de barrica)
Los blancos ya no son “solo para el calor”, hoy encontramos vinos que combinan frescura con capas aromáticas complejas, acidez vibrante y, en algunos casos, ese beso de barrica que los vuelve perfectos para platos de temporada como pastas cremosas, mariscos, pollo rostizado o quesos suaves.
Mis recomendaciones:
- Monte Xanic – Chardonnay (Baja California, México) Untuoso, elegante y con un manejo de barrica que suma sin estorbar, perfecto para comida reconfortante.
- Emilio Moro, Polvorete – Verdejo (España) Fresco, frutal, muy bebible. Va increíble con botanitas, sashimi, ensaladas o quesos suaves.
- Cava Quintanilla – Chardonnay (San Luis Potosí, México) Sorprendentemente aromático, con buena textura y un final largo. Acompaña pescados y pastas cremosas.
- Matsu, La Jefa – Godello (España) Mineral, elegante, profundo. Un blanco que se siente “serio” sin ser pesado.
¿Por qué tener un blanco en la mesa esta temporada?
Porque refresca, limpia el paladar, eleva cualquier botana y es el comodín perfecto cuando hay demasiados sabores conviviendo.
2. Tintos para compartir (y quedar bien siempre)
Si vas a llevar o abrir un tinto, más vale que sea uno que cumpla en mesa y guste incluso a quienes “no toman mucho vino”. Buscamos tintos equilibrados: con fruta presente, acidez que no canse, taninos suaves y un final amable.
Mis recomendaciones:
- Monte Xanic – Selección (Baja California, México) Un blend que siempre queda bien: fruta roja, especias y buena estructura.
- Valdubón – Reserva (Ribera del Duero, España) Más serio y profundo, ideal para carnes asadas, guisos o cortes de invierno.
- St. Huber – The Stag Pinot Noir (EE.UU.) Sedoso, aromático, elegante. Perfecto para cenas donde hay pavo, pastas o tablas de quesos.
¿Qué hace a un tinto “bueno para compartir”?
Que no sea pesado. Que invite a otra copa. Que respete la comida. Y, sobre todo... que no complique la conversación.
3. Espumosos: la chispa necesaria
Un espumoso no solo es para brindar. Acompaña botanas saladas, quesos cremosos, mariscos, frituras, postres ligeros... ¡prácticamente todo! Son los vinos más versátiles que existen.
Mis recomendaciones:
- Analogía – Brut (Querétaro, México) Honesto, fresco, perfecto para abrir la tarde.
- Juvé & Camps – Brut Nature (Cava, España) Seco, elegante y muy gastronómico. Para comer con él, no solo para brindar.
- Anna Codorníu – Blanc de Blancs (Cava, España) Floral, amable y muy equilibrado. Ideal para compartir con quien sea.
¿Por qué abrir un espumoso en esta temporada?
Porque transforma cualquier comida en celebración, y porque su acidez y burbuja hacen que todo sepa mejor.
Esta temporada se trata de disfrutar, compartir y dejar que el vino sea ese hilo conductor entre conversaciones, platillos y sobremesas largas.
Desde un blanco con barrica hasta un espumoso fresco o un tinto amable, hay un vino perfecto para cada mesa.
Y si no sabes cuál abrir... abre todos, la temporada lo permite.
