Otorgan Premio Vaso Roto a egresado de FFYL
El poeta regiomontano Rubén Esparza Arizpe obtuvo el tercer Premio de Poesía Joven Vaso Roto 2025 por Los cuadernos del agua, libro que comenzó a confeccionar en 2023 cuando fue becario del Centro de Creación Literaria Universitaria de la Máxima Casa de Estudios del Estado.
El premio, que consiste en la publicación de la obra y un monto económico de 4 mil euros, se otorgará el 12 de octubre en la Feria Internacional del Libro de Monterrey.
Egresado de la Licenciatura en Ciencias del Lenguaje de la Facultad de Filosofía y Letras, Esparza Arizpe se encuentra en estos momentos en Amberes, Bélgica, estudiando una maestría en música. De hecho, el viejo continente fue el espacio donde la obra ganadora tuvo su fase final y conclusión.
De acuerdo con su autor, el libro tiene alguna resonancia con Las maneras del agua, de Minerva Margarita Villarreal, un referente poético para todo tipo de escritor y lector, comentó Esparza Arizpe.
“La poesía de Minerva es un referente para mí como para todos los que tratamos de hacer nuestros ejercicios en la poesía en Nuevo León y gran parte de México.
“El libro, entre otras cosas, habla del fallecimiento de mi padre. Él murió ahogado hace 27 años y no lo alcancé a conocer. Lo que hace Minerva con el libro que gana el Premio Aguascalientes es que encarna un diálogo con una figura que no está, Santa Teresa de Jesús, y trata de hablar con ella. Eso trato de hacer yo con mi padre a través de lo que me cuentan, de las cosas que dejó atrás, de los objetos, libros y postales que me he encontrado. Quise hacer este ejercicio de diálogo porque era bastante importante para mí”, señaló el galardonado.
El libro apuesta por hacer una especie de revisión del panorama poético reciente en México y el mundo, donde los poetas se tornan a hablar del agua, de las maneras en que la exploran.
El río de la realidad
Los cuadernos del agua originalmente no estaba concebido para concursar. Era una necesidad personal de Esparza Arizpe por hablar de su padre y la fascinación por el agua.
“El libro avanza haciendo paso desde distintos registros. La última realidad justamente es el río donde mi padre se ahoga”, indicó el autor, cuya tutoría estuvo a cargo de la poeta Gabriela Cantú Westendarp.
Un libro orgánico y bien estructurado
El jurado calificador estuvo conformado por María García Zambrano, Luis Armenta Malpica y Edurne Batanero, poeta española ganadora de la pasada edición.
En el dictamen resaltaron que “es un libro orgánico y bien estructurado que se cimienta sobre la imagen del agua, un lugar común en la poesía que, sin embargo, se enriquece y transforma a través del paradigma científico y de las distintas miradas posibles mediante la memoria y la reflexión más filosófica”.