Lorenzo y la voluntad de combatir
No sé, pero que su viabilidad hoy es absolutamente improbable y servirá para que el régimen de la 4T se mofe de ellos.
“Puede ser, pero preferimos dejar testimonio y que se burlen de nosotros a cruzarnos de brazos y, como el autoritarismo es avasallante, no hacer nada”, me rebatió.
“Al autoritarismo se le combate con propuestas e ideas, no esperando sentados”.
¡Pum! Por fin palabras que rompen el claudicante réquiem de que la democracia mexicana ha sido acribillada e ingresamos con paso orwelliano a una tiranía sin escapatoria visible.
Al conversar con Lorenzo sobre su planteamiento de mantener las minorías legislativas, salvar la autonomía del INE y el Trife, garantizar condiciones de equidad en la competencia y buscar una reforma electoral pactada, jamás una impuesta, recordé la máxima de Clausewitz de que una fuerza sólo derrota realmente a la otra cuando le arrebata la voluntad de combatir.
“A nosotros no nos han quitado la voluntad de combatir”, sentencia la plática.