Opinión

Menús de degustación para primerizos: cómo vivir la experiencia sin miedo

Roberto Echeverría Venegas DETONA: Sé que el primer paso a un -fine dining- con menú de varios tiempos puede dar algo de nervio.
“¿Y si no entiendo los platos?”, “¿tengo que ir muy formal?”, “¿me voy a quedar con hambre?”. 

Spoiler: no.

Y vale totalmente la pena. 

Aquí te comparto lo esencial para animarte a vivir una experiencia gastronómica memorable… sin  miedo y sin quedarte con hambre.  

Primero: ¿Qué es un menú de degustación?  

Un menú de degustación es una secuencia de platillos (generalmente de 5 a 10 tiempos) pensada  para que conozcas lo mejor de la cocina del chef.

Es como una playlist cuidadosamente curada:  empieza suave, te lleva por varias emociones, y termina en alto.

No vas a pedir a la carta.

Te dejas  llevar. 

¿Y el maridaje?  

Algunos menús ofrecen pairing opcional.

Esto significa que cada tiempo vendrá acompañado de una  copa de vino, cerveza artesanal o incluso cocteles, pensados para realzar cada plato.

No es obligatorio, pero si eres curioso o te gusta el vino, es un sí rotundo. 

¿Me voy a quedar con hambre?  

Difícilmente.

Aunque los tiempos son pequeños, la cantidad total suele ser generosa y balanceada. 

Vas a salir satisfecho, no empachado.

Pro tip: no llegues con demasiada hambre ni comas antes “por  si acaso”

¿Dónde vivir esta experiencia en Monterrey?  

Si estás listo para animarte, aquí van cuatro lugares donde vas a quedar sorprendido: 

  • Sibau – Cocina elegante, producto local, técnicas modernas. Ideal para una primera vez. 
  • Tatemate – Inspiración prehispánica, fuegos abiertos, ingredientes ancestrales. Toda una  experiencia sensorial.  
  • Koli Cocina de Origen – Experiencia narrativa, todo gira en torno al noreste mexicano.  Inolvidable.  
  • Pangea – Un clásico de clásicos. Innovación constante y un servicio impecable.  
Tips finales para disfrutarlo al máximo:  
  • Ve con la mente abierta. No todo lo que vas a comer es “común”. Y eso está bien. 
  • No necesitas ir de etiqueta, pero sí arréglate. Parte de la experiencia es el ambiente. 
  • Pregunta. Los meseros están para guiarte. No hay preguntas tontas.  
  • Disfruta sin prisa. Esto es para saborear, no para correr.  
¿Vale la pena?  

Sí.

Si te gusta comer, si disfrutas de los detalles y quieres conocer nuevas formas de vivir la  gastronomía, un menú de degustación es mucho más que una cena: es una historia servida en varios  capítulos.  

Conocer, es no excederse.