El Exorcista: Creyentes - The Exorcist: Believer / EUA, 2023

Director: David Gordon Green. Guion: Peter Sattler, David Gordon Green, Scott Teems. Actores: Leslie Odom Jr., Lidya Jewett, Ann Dowd, Olivia O’Neill y Elen Burstyn. UNA ESTRELLA.

​Desde el 2005 y después del fiasco que fue El Exorcista IV y toda la controversia por partida doble alrededor de esa producción, habían puesto a dormir a la franquicia.

​Ahora, 18 años después de esa cuarta parte y 50 años del estreno de la original en 1973, sale a la luz El Exorcista: Creyentes, un nuevo intento de revivir la eterna lucha del bien y el mal reducido a la posesión demoniaca y el esfuerzo y sacrificio que toma, triunfar sobre el mal.

​Doce años después de un terremoto en Haití, donde Victor Fielding (Leslie Odom Jr) pierde a su esposa, su hija Angela (Lidya Jewett) nacida durante el caos sísmico y su amiga Katherine (Olivia O’Neill) desaparecen por tres días en un bosque y al reaparecer, algo regresó con ellas.

​Obviamente "ese algo" toma control de las niñas en la forma de una posesión doble y obliga a todos, creyentes y no creyentes, a unir fuerzas para exorcizar al demonio que llevan dentro.

​El Exorcista: Creyentes es un intrigante esfuerzo para revivir la franquicia con "un borrón y cuenta nueva", haciendo a un lado la parte 2, 3, 4.... ¡y es que en realidad que todas esas secuelas fueron nefastas!

​Ese estilo de reiniciar con una nueva parte 2 y olvidarse de todo lo demás, es tal cual la mano del director y guionista David Gordon Green, el responsable de resucitar Halloween en el 2018, de tomar en cuenta sólo la primera y soltar tres películas que, la mera verdad fueron de Guatemala a “Guatepeor”.

La actualización al siglo 21 tiene esa misma intención: se ve prometedora, pero se va diluyendo entre que para nada puede aproximarse a lo que ofreció la versión cinematográfica dirigida por William Friedkin (que acaba de fallecer el 7 de agosto pasado) y escrita por el autor de la novela, William Peter Blatty.

Hay en la película un dilema en el papá de Angela, que no es creyente, y los papás de Katherine que son cristianos, ambos y cada uno por su cuenta no creen que sus hijas hayan sido poseídas por un demonio.

Luego es tal cual la receta de cocina de El Exorcista elevada al millardo de películas que tocan el tema de posesión y exorcismo: vida cotidiana, posesión, dudas, efectos especiales, exorcismo.

Los personajes están tan mal planteados: todos a la carrera y tan a la carrera que el filme, en manos del realizador Green, peca de desarrollar sólo a Angela, es la que se avienta fuertes revelaciones, mientras que Katherine es una pálida sombra en la historia “ni fu, ni fa”.

Claro, aparece Ellen Burstyn recreando a su icónico Chris McNeill de la película de 1973... Pero en un arco temático totalmente fuera del cuadro, buscando una paz que no ha logrado encontrar (léase, lo mismo de siempre).

Y luego lo de costumbre, la agenda de tolerancia e inclusión, tratando de quedar bien con no solo las religiones cristianas, sino también con creencias paganas alejadas del monoteísmo (incluyendo el vudú y un ritual de protección) junto con la idea que, en la suma de todo, la fuerza está en las personas y no en la religión.

A la larga no es de que quede mal con el género, está a la par de tantas y tantas películas... Simplemente el filme nunca ofrece nada nuevo aún después de 50 años de la original El Exorcista.

El Exorcista de 1973 ofrecía la incapacidad de enfrentar un terror como es la posesión, mientras que El Exorcista: Creyentes está pensando ya aquí y ahora que va a recetar en la secuela.

TE DEJAMOS EL TRAILER:
https://www.youtube.com/watch?v=zoqnMKB-htE
Justo Elorduy Hevia

Nacido en 1958, año de estreno de El Puente Sobre el Río Kwai. Crítico de cine y por 34 años analista del género en el periódico El Norte. Amante de la magnificencia de la pantalla grande. Y no hay sustituto. Lo que se ve en la pantalla grande, se queda en la pantalla grande.