Fuera De La Caja

La tumba

Macario Schettino DETONA® Pemex es, ya, ‘la tumba de la soberanía económica nacional’.
https://vimeo.com/1091444957

El gobierno enfrenta dos amenazas muy serias, que ponen en riesgo su supervivencia y, en consecuencia, la viabilidad del país. Una es económica y la otra política. Permítame hablar hoy de la primera, concentrándome en el elemento más relevante de la amenaza: Pemex.

Creo que no se ha entendido a cabalidad el problema que enfrenta la petrolera, el negocio importante es la producción de crudo, no la refinación ni otras actividades industriales asociadas.

En septiembre de 2018, cuando el grupo que hoy gobierna tomó el poder, Pemex producía 1.8 millones de barriles diarios (mbd).

En junio de este año, a duras penas superó 1.3 mbd, una contracción de 25%. Desde hace algún tiempo, le suman la producción de condensados para que se vea menos feo, pero se trata de un producto diferente, menos valioso.

En el sexenio anterior se prometió que la producción crecería, pero no fue así, también se decidió incrementar la refinación en México, lo que ha supuesto mayores pérdidas.

Para sostener estas dos malas ideas, en ese sexenio le entregamos a Pemex cerca de un billón de pesos, no produce más, no pierde menos, no redujo su deuda. Es más, ha dejado de pagar a sus proveedores por ya muchos meses.

Esto es parte de lo que no se entiende, hoy en día, quienes producen el petróleo son los proveedores, no la empresa del gobierno, un amigo que sabe del tema, Luis Miguel Labardini, lo ejemplifica comparando con las armadoras de autos.

Esas grandes empresas diseñan, organizan y comercializan autos, que se construyen con múltiples piezas producidas por proveedores, que son cuidadosamente monitoreados por las armadoras, pero que son los responsables de que, al final, haya un auto listo para vender.

Así ocurre con las petroleras:

Desde la ingeniería sísmica hasta el manejo del crudo, pasando por extracción, son los proveedores los que hacen el trabajo; si estos proveedores no tienen dinero, porque Pemex no les paga, no pueden cumplir. En junio del año pasado, había 59 equipos de perforación (drilling rigs) en operación.

En junio de este año, apenas 27, un ligero incremento frente a mayo, cuando había nada más 24. Los tres nuevos están en Bellota-Jujo, Poza Rica y Veracruz, que en conjunto aportan nada más 15% de la producción de crudo. A grandes rasgos, Pemex se ha ido a la mitad.

La cantidad que se debe a proveedores ronda 20 mil millones de dólares, pero en realidad hay una deuda oculta de una magnitud similar, que no se registra porque Pemex no acepta en su sistema las facturas por trabajos ya realizados.

Por otra parte, en el transcurso de los siguientes 12 meses, Pemex deberá cubrir amortizaciones de deuda financiera por casi 530 mil millones de pesos (Imco), más o menos 28 mil millones de dólares.

Digamos que se necesitan 70 mil millones de dólares nada más para que Pemex pueda continuar operando.

Hacienda construyó un instrumento financiero para obtener 12 mil millones de dólares que se destinarán al pago de esa deuda financiera. Banobras hará algo para ofrecer una cantidad similar, dirigida a proveedores.

A pesar de que estas dos acciones son, en realidad, asunción de la deuda por parte del gobierno, siguen faltando 45 mil millones de dólares.

Buscando buenas noticias, Dos Bocas ya opera, según las estadísticas de Pemex.

En junio aportó el proceso de casi 200 mil barriles diarios, elevando el total del sistema a 1.1 mbd. El costo financiero mensual de Dos Bocas asciende a 125 millones de dólares, para procesar 6 millones de barriles. Si ganara 20 dólares por barril, apenas alcanzaría para cubrir ese costo. Jamás se podrá recuperar la inversión.

Por eso Pemex es ya, claramente, la tumba de la soberanía económica nacional, por usar sus palabras.
https://vimeo.com/1015118818
https://vimeo.com/1089261994
https://vimeo.com/1091496933
Macario Schettino

Profesor de la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey.