Trump está liquidado

Es hora de dar una lección a los que basan su fuerza en transgredir las leyes, desafiar la Constitución y salir impunes por el miedo que suscita hacerlos respetar las reglas.

BOGOTÁ, Colombia.-

Un presidente mentiroso contumaz que pasó por encima de la Constitución e intentó dar un golpe para permanecer en el poder, está en camino de ir a la cárcel.

Donald Trump robó documentos secretos de la Casa Blanca, por lo que la acusación debe ser por espionaje.

Los agentes del FBI que catearon su casa en Mar-a-Lago, Florida, encontraron cuatro paquetes de documentos ultrasecretos, relacionados con la defensa nacional, incluyendo material ‘sensible’, referido a armas nucleares.

También le incautaron tres paquetes con documentación clasificada como secreta, y otros tres paquetes con información confidencial.

El bravucón está liquidado

A sus 79 años de edad, Joe Biden y las instituciones democráticas están en camino de rescatar la validez del Estado de derecho que ha hecho fuerte a ese país: nadie por encima de la ley.

Nadie, así sea un populista carismático, con millones de seguidores, que podría levantar en armas a no pocos de sus simpatizantes.

Es una hora crucial para Estados Unidos.

Algunos políticamente correctos sostienen que fue un error catear la casa de Trump en Mar-a-Lago, porque eso lo hará más fuerte y lo pondrá de nuevo en la Casa Blanca.

Falso. Lo que fortalece a los líderes mesiánicos que se piensan por encima de las leyes es la impunidad.

Desde luego hay y habrá movimiento de olas bravas, pero el deber de las instituciones y sus responsables es hacer cumplir la ley.

Si lo logran, el país será fortalecido, el transgresor castigado, tras las rejas o inhabilitado de por vida para ocupar cargos públicos.

La orden de cateo a la casa de Trump solicitada por el fiscal general Merryk Garland fue impecable.

Un allanamiento con escrupuloso respeto a las leyes y a los derechos del sospechoso (los detalles jurídicos del proceso los explicó Jorge Berry en estas páginas 

https://www.elfinanciero.com.mx/opinion/jorge-berry/2022/08/11/el-cateo/

Garland, un procurador mesurado, sin perfil de hombre de batalla, presentó personalmente la solicitud de cateo.

El FBI buscaba algo grande, y lo encontró.

Secretos de Estado sobre programas militares y nucleares de Estados Unidos, en poder de Trump.

¿Por qué robó Trump documentos con secretos militares de Estados Unidos?

A él no le servían de nada. Entonces la pregunta adquiere otra dimensión, desde luego escalofriante:

¿para quién robó Trump ese cúmulo de archivos de los programas de defensa de su país?

Con el historial de Trump, admirador de Vladimir Putin y otros dictadores, nada está descartado.

Algo de lo que estaba en poder de Trump es alucinante.

El FBI llevaba meses, discretamente, negociando con los abogados de Trump la entrega de los materiales que sustrajo y que habían sido inventariados por los archivos nacionales, sin llegar a ningún acuerdo.

Trump se negó a entregarlos, pues se sintió impune y políticamente blindado por su popularidad.

Fue entonces cuando el águila calva comenzó a volar sobre la cabeza de Donald Trump.

Ahora nadie puede evitar que las instituciones actúen.

En Estados Unidos hay una larga tradición de la independencia del Departamento de Justicia.

NIXON Y EL WATERGATE

Cuando Nixon quiso romper ese muro invisible, durante el Watergate, le renunció todo el Departamento de Justicia. Al célebre episodio se le conoce como la Masacre del Sábado por la Noche.

Fue la misma amenaza de los fiscales de carrera cuando Trump quiso someter al Departamento de Justicia en el periodo poselectoral de 2020. Trump se dobló.

“¡Enciérrenla!”, gritó Donald Trump contra la entonces secretaria de Estado, Hillary Clinton, quien cometió la imprudencia de enviar desde un servidor privado sus correos electrónicos.

Durante su presidencia, Trump firmó la ley que castiga con cinco años de cárcel la sustracción de documentos secretos.

Y él, Trump, hizo algo mucho peor que Hillary y caería en el supuesto de cárcel que firmó: sustrajo documentos clasificados como secretos, ultrasecretos, y sensibles para la seguridad nacional de Estados Unidos.

El cateo de su casa es sólo parte de un tsunami de problemas legales contra el expresidente.

Además, enfrenta una investigación criminal en New York por sus transacciones inmobiliarias. En el mismo estado tiene una demanda civil por haber inflado el valor de sus propiedades.

MENTIRAS

Como presidente, Trump profirió decenas de miles de mentiras, que están documentadas, y algunas de ellas pueden tener implicaciones legales.

Si la evidencia es abrumadora en el sentido de que Trump violó la ley, como todo indica que ocurrió, el Departamento de Justicia no tendrá otra opción que actuar, al margen de las consecuencias políticas.

Vienen semanas y meses definitorios para Estados Unidos.

Trump tiene capacidad de motivar a gente armada a cometer actos de locura y terrorismo interno. Y no a 100 ni a mil, sino a muchos más.

Es la hora de la ley.

Y es hora de dar una lección a los que basan su fuerza en transgredir las leyes, desafiar la Constitución y salir impunes por el miedo que suscita hacerlos respetar las reglas.

Pablo Hiriart

Nacido en Chile, emigró a México a fines de los 70. En 1980 inicia su etapa como reportero del semanario Proceso y del diario La Jornada antes de formar parte del equipo de comunicación del gobierno federal.
Desde el año 2016, participa en México Confidencial en Azteca 13, en Proyecto 40 y es Director General de información política y social del diario El Financiero, donde escribe la columna "Uso de Razón".