Yo quiero tener un millón de amigos (firmas), para ser candidato a la presidencia de México

Raúl Monter DETONA aquí: Queda claro que la dirigencia del PAN quiere tener el sartén por el mango y elegir a su candidato "en lo oscurito"...

El sábado 20 de mayo hubo junta de Consejo Nacional del PAN a puerta cerrada para tratar diversos temas; sin embargo, lo sobresaliente fue impulsar un “método que involucre a la sociedad" para elegir al abanderado a la Presidencia, según relatan algunos de los consejeros que asistieron a dicho evento.

Esta idea inicial de Marko Cortés, presidente del PAN, es con el objeto de acotar los deseos ambiciosos de algunos aspirantes o suspirantes a la candidatura de la oposición, dentro del PAN, del PRI, del PRD, y uno que otro envalentonado ciudadano que ha levantado su manita.

Queda claro que la dirigencia de este instituto político quiere tener el sartén por el mango, con el objeto de controlar dicho proceso y a final de cuentas elegir "en lo oscurito" al candidato, claro falta ver que dice el PRI y el PRD.

El argumento del “panista mayor” es que cualquier ciudadano debe acreditar su representatividad, por ello se le ocurrió poner como cuota de acreditación tan solo un millón de firmas.

Por cierto, el padrón de miembros del PAN no llega ni a trescientos mil... entonces le ponen la couta muy cara al ciudadano para usar el membrete del PAN. Es decir, con esta condición lo que realmente quiere Marko es desanimar a los ambiciosos pre, pre, pre candidatos; y para medir realmente sus fuerzas, tendrán que hacerse las siguientes preguntas:

  • ¿Es factible que pueda reunir un millón de firmas?
  • ¿Tengo los recursos económicos y humanos para lograrlo?
  • ¿Podré convencer a mis compadres, amigos, proveedores y mecenas a fondear este proyecto, que solo es para registrarme como precandidato? Falta ver si gano la elección constitucional.

Sin embargo, es necesario señalar que la oposición y los organismos de la sociedad tienen un compromiso mayor: 

Convencer al electorado que tienen mejor oferta de gobierno que Morena, ya que actualmente la intención del voto sigue siendo favorable a la 4T.

El reto es enorme, ya que no solo depende de cómo elegir al candidato de la oposición, acompañado de la ciudadanía, sino también de su oferta de gobierno, ya que aunque Morena ha venido teniendo menos votos después de la elección del 2018.

El verdadero objetivo es sacar a votar al elector, que no confía en los partidos políticos, ni en el gobierno... y que tiene cara y apellido: se llama “abstencionismo crónico”, lo que representa alrededor del 40% del padrón electoral, que es igual a 38 millones de mexicanos que no tienen interés en ir a votar; ese es el reto.

Irá viniendo, iremos viendo si me equivoco... la verdad lo deseo. 

Raúl Monter Ortega

Coordinador de Campañas Electorales a nivel Federal, Estatal y Municipal. Editorialista, observador y activista de la vida política nacional. Promotor de las libertades constitucionales de los mexicanos. Catedrático y vicerrector de la Escuela Superior de Procesos Electorales.