La generación de cristal

Más partidos, más lesiones.

Si bien también son Millennials, esta vez no hacemos alusión al término peyorativo que ha estigmatizado a la juventud.

La Generación de Cristal en el futbol se compone de aquellos jugadores contemporáneos a nuestros días que han tenido el cartel de “estrellas” mundiales, pero cuyas lesiones les han impedido trascender más allá o llegar a un escalón más alto de manera individual.

Uno de los casos más significativos es el del alemán Marco Reus, delantero de 31 años del Borussia Dortmund de Alemania.

Además de ser un “crack”, sus huesos también convierten esa onomatopeya en realidad desde hace más de una década.

Por lo menos una vez cada temporada, el Dortmund no cuenta con Reus por largos períodos de tiempo a causa de contracturas, fatigas, tendinitis y roturas de ligamentos de sus rodillas.

Un informe periodístico de julio de 2020 reveló que Reus se había perdido (hasta aquel entonces) alrededor de 900 días de su carrera profesional, el equivalente a poco más de 2 años y 5 meses.

Otro jugador de clase mundial fustigado por las lesiones es el británico Gareth Bale. El oriundo de País de Galés fue, hasta 2013, el futbolista más caro de la historia, cuando Real Madrid lo adquirió por más de 100 millones de euros.

En el equipo blanco estuvo siete temporadas, ganó muchos campeonatos, entre ellos un tricampeonato de la Liga de Campeones de Europa, pero constantemente se lastimaba: hasta principios de 2019, había acumulado un total de 23 lesiones, según un recuento del diario español Mundo Deportivo.

Apodado El Tigre, el colombiano Radamel Falcao es otra estrella mundial que es recurrente a los quirófanos. Surgido de las fuerzas básicas del River Plate de Argentina, a los 20 años ya se había roto los ligamentos del tobillo y rodilla derecha.

En el 2014, en el mejor momento de su carrera y a escasos cinco meses de la Copa Mundial de Brasil, Falcao se rompió los ligamentos de la otra rodilla. Actualmente milita en el Galatasaray de Turquía y acaba de superar un desgarro de fémur.

En México, el caso más sonado es el de Giovani Dos Santos. Además de su extraña carrera parecida al “Curioso Caso de Benjamin Button” (pues debutó profesionalmente en el Barcelona y hoy está en el América), las lesiones de muslo, tobillo y musculares han sido un calvario para el delantero de ascendencia brasileña a lo largo de su carrera.

“Lo traje al América por la calidad de jugador que es, pero tiene una situación y es que se lesiona mucho; no tengo que explicar su carrera, ya que es así, y se lesiona y es de: ‘me duele y me duele’ y de ahí no lo sacas”, aseguró hace unos días Miguel Herrera, quien dirigió a “Gio” en la Selección Mexicana y en Las Águilas.

¿Pero por qué escuchamos que los futbolistas se lesionan muy a menudo hoy en día? La ecuación que indican los expertos es sencilla: a mayor cantidad de partidos jugados por torneos, el desgaste es también mucho.

Según un estudio realizado por la Universidad Leeds Beckett en el Reino Unido, dictado por El Espectador de Colombia, durante la temporada 2015-2016, los jugadores presentaron un promedio de 1.9 lesiones durante esa campaña, mientras que entre 1997 y 1999, 20 años ante, el promedio era tan solo de 1.3

MÁS PARTIDOS, MÁS LESIONES

El reporte también arrojó que las extremidades inferiores son la parte más común del cuerpo en el que los jugadores se lesionan, con un 64.2%, entre las que destacan molestias en los muslos, rodilla y tobillo.

En el futbol moderno de Europa, un futbolista oscila a jugar, en promedio, entre 50 y 60 partidos por temporada, en un lapso de 9 meses; mientras que en México, ronda entre los 30 y 40.

Otros factores como la genética del deportista, así como su adaptación a los métodos de trabajo del entrenador en turno, también influyen en el desarrollo de las lesiones.

Metodologías son metodologías: algunas se adaptan muy bien a ciertos futbolistas y a otros tal vez no tanto.
Juan Reyna Loa

Periodista deportivo desde hace 12 años. Ha sido reportero y comentarista en radio, además de editor de medios impresos y digitales en Monterrey.