“Resiliencia geopolítica”, un reto para las compañías internacionales

Empresas globales comienzan a preguntarse cómo continuar la operación, sin sufrir significativas limitantes operativas derivadas de agendas políticas.

Consultores especialistas en estrategia y negocios cuestionan el reto que ahora enfrentarán las empresas, sobre todo las transnacionales, de contar con una capacidad de “resiliencia geopolítica” conforme el orden global evoluciona.

Su conclusión es que las organizaciones deben invertir en capacidades, estructuras, tecnología, procesos, y sobre todo en personal con conocimiento para enfrentar los nuevos riesgos que surgirán, producto de un contexto de relaciones internacionales fragmentadas entre potencias y países.

Una encuesta de la consultora Mckinsey, sobre las condiciones económicas globales, posiciona al riesgo geopolítico como uno de los principales aspectos de atención en la agenda de directores generales.

Se considera también que el modelo de las últimas décadas para la globalización, que consistía primordialmente en especialización, crecimiento, y desarrollo de mercado, está ahora siendo modificado por las diversas crisis globales geopolíticas.

Adicionalmente, el reporte de tendencias globales 2040 del Consejo de Inteligencia Nacional de EUA, refiere que “en las próximas dos décadas, la competencia por la influencia global alcanzará sus más altos niveles desde la Guerra Fría”, y menciona entre sus conclusiones que “probablemente ningún país dominará todas las regiones y dominios, y una diversidad de actores competirán por extender sus ideologías, objetivos, e intereses”.

Mi análisis y prospectiva:

Directores generales de empresas globales comienzan a preguntarse cómo continuar la operación de sus empresas, sin sufrir significativas limitantes operativas derivadas de agendas políticas de los países donde operan.

Aunque el riesgo de permiso para operar -por parte de cualquier gobierno-, siempre ha existido y se ha contemplado como parte del reto de expansión internacional de cualquier transnacional, el contexto actual de enfrentamiento entre potencias, y los escenariosprevisibles, indican que evolucionará en su complejidad.

Por ejemplo, no deberá sorprender si próximamente, los gobiernos que mantienen cierta animadversión contra alguna potencia o país en específico, modifiquen el marco fiscal, legal, e inclusive financiero (e.g. retiro y movimiento de fondos) para empresas de cierto origen, o soportadas en su mayoría por capitales de alguna nacionalidad en específico.

Un contexto geopolítico de mayor confrontación, obligará también a directivos a reflexionar la conveniencia o desventaja de un alto o bajo perfil comunicacional, considerando que sus comunicados podrán ser interpretados de distinta manera en cada geografía, o que pudieran provocar alguna reacción desfavorable.

Los planes de posicionamiento de China como potencia global, aunado a diversas animadversiones provocadas o exacerbadas por países con cierto antagonismo hacia EUA (e.g. Rusia, Irán), continuarán generando enfrentamientos y diferencias entre potencias globales, que conformarán bloques de países afines según sus intereses y sistema de gobierno.

Lo anterior derivará en complejos contextos operativos para empresas transnacionales, debido a que los gobiernos, suelen relacionar o identificar una empresa con cierta nacionalidad. Es decir, existe el riesgo de que un gobierno aplique un escrutinio mayor, o inclusive limite la operación, de una empresa identificada como originaria de un país con el cual se tiene alguna problemática geopolítica.

La competencia más intensa se verá entre compañías estadounidenses y chinas, con alta probabilidad que las diferencias entre sus mandatarios y gobiernos, resulte en afectaciones para su desempeño y crecimiento en mercados rivales.

Cómo mantenerse neutral y ajeno a contiendas entre gobiernos, será ahora un objetivo primordial empresarial.

Enrique Alanís

Ejecutivo con experiencia en alta dirección en la iniciativa privada, en el sector público como Secretario en el Gobierno de Nuevo León, y como presidente y miembro en ONGs. Columnista, “vlogger”, expositor. Consejero en empresas y organismos. Economista y Maestría en Comercio Electrónico por el ITESM, Maestría en Relaciones Internacionales por la Fletcher School of Law and Diplomacy.