Si Pedro Infante hubiera sido Presidente...
Pedro Infante ha sido uno de los mexicanos más queridos de todos los tiempos.
Presenté un programa de radio en la plataforma digital de Proyecto Radio MX sobre la vida de Pedro Infante, en el que analicé y comenté, desde un punto de vista más existencial que político, lo que hubiera pasado con México si después del mandato del Presidente Miguel Alemán Valdés, hubieran elegido a Pedro Infante como su sucesor presidencial, a partir del año 1953, cuando Pedro ya era un gran actor, y literalmente, un ídolo del pueblo mexicano e internacional.
Claro que el momento de México de los años 50s no era para que un actor, por más querido que fuera, tomara la dirigencia de la Patria, lo tenía que hacer un político priísta del calibre de Rodolfo Ruiz Cortines, pero pensar en lo que pudo haber sido de este gran país siguiendo la ideología de un hombre como Pedro Infante, tal como lo hicieron tiempo después los estadounidenses cuando tuvieron de Presidente a un actor de Hollywood: Ronald Reagan, resulta muy reconfortante intelectualmente.
Sólo imaginar que todo lo que hubiera dicho, planeado y propuesto Pedro Infante siendo tan querido, tan respetado y tan admirado también como Presidente de México, y si se hubiera continuado con ese legado... ¡Resulta fascinante!.
No se hubiera devaluado el peso frente al dólar, los trabajos en México hubieran sido mucho mejor remunerados, habría más charros y mariachis que burócratas, no se hubieran tenido que ir de braceros tantos mexicanos a los Estados Unidos por necesidad económica, no hubiera ocurrido lo del 2 de Octubre de 1968 al no intentar realizar obsesivamente las Olimpiadas en México, pero obviamente el Mundial de 1970 sí se hubiera celebrado igual con Pelé, no se hubiera nacionalizado la Banca, ni se hubiera tenido que eliminar del peso 3 ceros, y hoy no habría necesidad de una nueva transformación.
Quizá esto es exactamente lo que se necesita en México, no necesariamente que un Pedro Infante gobierne, pero que sí se le quiera, se le respete y se le admire al Presidente en funciones, como si se tratara de un Pedro Infante…
Es un sueño no tan lejano de la realidad, conociendo la capacidad afectiva del pueblo mexicano.
Nota histórica agregada:
Pedro Infante, que en paz descanse, era sinaloense: nació en Mazatlán, se le conoció popularmente como "el ídolo de Guamúchi", que es la ciudad de Sinaloa donde se encuentra coincidentemente, Badiraguato.