Carlos Chavarría DETONA® Bajo la influencia subrepticia que ejercen las tecnologías de ciencia de datos, la democracia va perdiendo su viabilidad como forma idónea para la conducción de los asuntos públicos, si es que acaso se desea mejorarla.

Carlos Chavarría DETONA® La magnitud de los riesgos que enfrentamos, y que previsiblemente se agudizarán a lo largo del siglo XXI, nos exige aprovechar al máximo todo el conocimiento y los avances científicos que podamos desarrollar.

Carlos Chavarría DETONA® El concepto de "flexibilidad ideológica" plantea una de las tensiones más significativas de la política contemporánea.

Carlos Chavarría DETONA® Una aclaración pertinente antes de presentar estas lìneas . Desde hace algunos años se ha pretendido que la tecnología en general, pero en especial las tecnologías de información, serán las salvadoras de todos los riesgos y la única fuente del bienestar futuro de la civilización. Si se piensa en términos de eficiencia, por supuesto que toda tecnología tiene un sustrato fincado para lograr hacer más con menos y hacerlo de la manera más simple.

Carlos Chavarría DETONA® ¿Hemos cruzado el umbral hacia una era donde la política es una esfera autónoma, ajena a la realidad que pretende gobernar y sus costos gravitan sobre la sociedad a la que pretende servir? La respuesta, tristemente, parece ser afirmativa.

Carlos Chavarría DETONA® La censura y la prohibición de ideas, proclamas y, en general, de toda acción contraria al status quonormalizado por el poder, han acompañado a la humanidad desde sus orígenes y muy seguramente continuarán así.

Carlos Chavarría DETONA® En un mundo donde los gobiernos, tanto de izquierda como de derecha, recurren cada vez más al populismo, resulta crucial desentrañar sus mecanismos y consecuencias.

Carlos Chavarría DETONA® En una era definida por el vertiginoso avance tecnológico y un flujo de información sin precedentes, la humanidad se encuentra en una coyuntura crítica. Poseemos una capacidad inigualable para dar forma a nuestro mundo, para diseñar grandes visiones y, crucialmente, para hacerlas realidad. Sin embargo, persiste una verdad inquietante: a pesar de nuestro ingenio, nuestra civilización a menudo parece avanzar sin una estrella guía, a la deriva en un mar de intereses fragmentados y ventajas a corto plazo.