57 Segundos Atrás - 57 Seconds / EUA, 2023

Director: Rusty Cundieff. Guion: Rusty Cundieff y Macon Blair. Actores: Josh Hutcherson, Morgan Freeman, Greg Germann y Lovie Simone. UNA ESTRELLA.

​El concepto y la idea de 57 Segundos Atrás parte de muy buenas ideas dentro de la ciencia ficción: la capacidad de viajar aunque sea un minuto, una hora o días, con la posibilidad de controlar en el pasado el destino de uno.

​Eso sucede en la película con Franklin (Josh Hutcherson de Los Juegos del Hambre), que luego de salvar la vida a un empresario (Morgan Freeman), se encuentra un anillo que lo puede regresar en el tiempo 57 segundos.

​Lo primero que hace con su descubrimiento es apropiarse de la chica guapa (Lovie Simone), hacerse rico en casinos, y luego ya al final, investigar a un empresario farmacéutico por un potente analgésico que está matando a miles.

​Bien, sale Morgan Freeman, pero hagan de cuenta que aparece más en el poster del filme que en la película en sí.

Todo recae en las malas decisiones de Franklin que lo van enredando en una situación que ni el anillo lo puede salvar.

​Sí, a veces es interesante lo que le ocurre, pero el guion se va quedando sin ideas.

Básicamente, la película sufre de un muy notorio bajo presupuesto que hace que la historia se lleve a cabo en dos, tres interiores y mucha fotografía en estacionamientos.

​Otras películas como Príncipe de Persia: Las Arenas del Tiempo manejaron el tema de la manipulación temporal; 8 Minutos Antes de Morir, de hecho da ese margen de tiempo para amarrar mejor la trama, y El Vidente ofrece más manipulación del tiempo por el estilo.

57 Segundos Atrás deja muchos huecos, entre ellos la misteriosa figura de Morgan Freeman y sus Tri-bands misteriosas que jamás llevan explicación alguna, sobre todo las “aún más especiales” que le regala a la pareja metida en el drama.

​Claro que el filme quiere hacer señalamientos y levantar dedos acusadores contra los emporios que de una forma u otra quieren controlar el mercado, y para bien o para mal, como siempre: lo que importa es el dinero.

​Pero hasta eso, 57 Segundos Atrás debió usar más de un salto para atrás para corregir el camino del filme que conforme de se va montando el clímax, se va desinflando.

​¿Tan mala que es buena? No.

En este caso vamos a dejarla en: debió ser buena, pero se nos fue por el camino de mala, ni metiéndole 57 segundos para atrás no alcanzan para salvarla.

TE DEJAMOS EL TRAILER:
https://www.youtube.com/watch?v=xFfe88RAlhs
Justo Elorduy Hevia

Nacido en 1958, año de estreno de El Puente Sobre el Río Kwai. Crítico de cine y por 34 años analista del género en el periódico El Norte. Amante de la magnificencia de la pantalla grande. Y no hay sustituto. Lo que se ve en la pantalla grande, se queda en la pantalla grande.