Argylle: Agente Secreto - Argylle / EUA, Inglaterra, 2024

Director: Matthew Vaughn. Guion: Jason Fuchs. Actores: Bryce Dallas Howard, Sam Rockwell, Bryan Cranston, Catherine O’Hara, John Cena y Henry Cavill. DOS ESTRELLAS.

Matthew Vaughn, realizador, creador y responsable de traer a la pantalla grande su universo de Kingsmen, ahora regresa con una entrega diferente, con Argylle: Agente Secreto.

Lo interesante es la vida de la escritora Elly Conway (Bryce Dallas Howard) que en las páginas de sus novelas le ha dado vida a un superagente secreto, Argylle que se enfrenta a su agencia para acabar con ella.

Pero resulta que lo que ella escribe, todo es realidad y ha sucedido y la presencia de Aidan (Sam Rockwell), otro superagente pone en la cuerda floja la cordura y realidad de Elly como escritora.

Vaughn trabajando el guion de Jason Fuchs (Mujer Maravilla, Pan) muestra un mundo deschavetado donde al parecer hay mas agentes secretos caminando las calles que seres humanos normales (igual que el de John Wick, con mas asesinos que humanos comunes).

Un frenético inicio en un tren (demasiado similar a Tren Bala) arranca una historia que no suelta el tema del gran misterio que rodea a la escritora y la tremenda confusión cuando Elly se ve entrelazada con el personaje real de Argylle (Henry Cavill).

Hay una serie de personajes que entran en juego a parte de Argylle que es su compañero Wyatt (John Cena) y la despistada mamá de Elly (Catherine O’Hara, la mamá de Kevin en Home Alone) y si ustedes creen que Dua Lipa va a tener mucho que hacer en el filme, compren las palomitas con tiempo, si no van a entrar a la sala con la sorpresa que ya no hay Dua Lipa.

Y la otra sorpresa es que no esperen ver demasiado a Cavill y a Cena haciendo mucho. El poster promocional y los cortos de la película son demasiado engañosos.

La primera mitad es en realidad muy bien llevada, muy bien coreografiada, aunque siempre me han sorprendido esas superagencias repletas de superagentes pero que en realidad no pasan de ser NPCs (non playable characters) de videojuegos para que los superasesinos jueguen tiro al blanco con ellos y aquí sobran.

Para empezar, el que parece ser el antagonista principal, Carlos (Tomás Paredes) un superasesino a la par de los personajes principales, nop. Ahí queda perdido en el limbo.

Pero, igual que en Kingsman 1 y 2 y la precuela The King’s Man, Vaughn se queda sin historia. Se frena la progresión de la historia y comienza a soltar giros, demasiados giros por minuto, demasiados “vete para allá, vete para acá” y tremenda confusión cuando se presentan aún mas personajes que “ni fu ni fa”.

Momentos tipo esos “ya se va a acabar… ah no, vamos a darle mas” y así se la lleva como unas cuatro veces hasta la sobresaturación. Ya un detalle muy marcado del director Vaughn que se va al extremo y no sabe como regresar de él por encima de pensar que con presentar un final “tranquilo” ya quedó todo bien.

No pos no, así no.

Y en los créditos finales, sin revelar nada, la idea de integrar el universo de Argylle al de Kingsmen, pues a ver como les va.

TE DEJAMOS EL TRAILER:
https://youtu.be/k0zT5fHtnAQ
Justo Elorduy Hevia

Nacido en 1958, año de estreno de El Puente Sobre el Río Kwai. Crítico de cine y por 34 años analista del género en el periódico El Norte. Amante de la magnificencia de la pantalla grande. Y no hay sustituto. Lo que se ve en la pantalla grande, se queda en la pantalla grande.