Empresarios, instituciones y sociedad, un trinomio por reparar. Parte 2
“En el pecado está la penitencia”. -Antiguo dicho español.
A poco de iniciar este sexenio, algunos empresarios,organizaciones civiles y ciudadanos sintieron el peligro que representan este presidente y sus aliados para sus intereses y para el país, y decidieron actuar y organizarse para frenar sus malas acciones y finalmente destronarlos.
Así nacieron proyectos como “Sí por México”, “Va por México”, “X ciudadanos” Grupo de exgobernadores del PAN, y muchos otros que, desafortunadamente, salvo en las elecciones del 2021, en mi percepción no han creado un bloque común ni tenido suficientes resultados significativos para frenar (salvo honrosas excepciones) las tropelías de este gobierno, y lo peor, nunca mostraron un líder carismático y unificado que convenciera a la ciudadanía a unírsele para reemplazar a este gobierno.
Mañosamente, el presidente López Obrador ha usado todas sus artimañas y recursos para bloquear estas acciones hasta donde puede.
UNO MÁS, PARA CONFUNDIR.
Confundiendo más aún a la ciudadanía, recién surgió un grupo (uno más) de creación reciente:
El llamado grupo “Colectivo por México”, que se integra de un diverso y amplio grupo de representantes de empresarios, instituciones de grupos sociales, intelectuales, académicos, profesionales, grupos indígenas, activistas, periodistas, expolíticos, algunos de ellos “fichas muy gastadas y quemadas políticamente”, con su iniciativa “punto de partida” que, a groso modo,consiste en construir un nuevo proyecto de país, basado en la participación comprometida de esos sectores e integrando eficazmente a la ciudadanía.
Todos ellos, aunque tardíamente, están intentando reparar el trinomio empresarios, instituciones y sociedad.
Bien. Sea quien sea el grupo líder de las iniciativas, y sea o no auténtica esa intención de hacer una oposición interesada solo en el bien del país integrando necesariamente en las decisiones y movilizaciones a la ciudadanía, veo cuatro problemas principales a resolver para esto último, claro,además de la guerra sucia esperada del propio gobierno de López Obrador:
- Estos grupos de empresarios y organizaciones todavía son como la “Hidra” (animal de 7 cabezas de la mitología griega) que tienen muchas cabezas de diferentes orígenes, y se están tardando en definir una sola cabeza con suficiente liderazgo para buscar la confianza y aprobación de la ciudadanía en el voto para despedir a este gobierno en 2024;
- Para derrotar a este gobierno en las urnas y otras acciones, se necesita el apoyo activista de unos ciudadanos que, si bien en parte también se oponen a las acciones de este gobierno, todavía guardan muy malos recuerdos de aquellos empresarios que tanto losignoraron (y a veces abusaron de ellos) en décadaspasadas, y por lo tanto desconfían de ellos. Hay que recuperar la confianza, y darles fe, sobre todo a las masas de bajos recursos, que son mayoría en el voto, y más susceptibles de ser coaccionados o engañados por el gobierno.
- No se ha visto un verdadero mensaje informativo y de atracción a los jóvenes (19 a 39 años) quienes representan el 49% del padrón electoral a 2022, para involucrarlos en la vida política del país y voten en las elecciones, ante las cuales han mostrado desinterés y desmotivación. Este segmento de jóvenes en 2018 votó solo poco más del 50% (datos del INEGI). Para atraer el voto de este segmento es necesario involucrar en todas las iniciativas a líderes jóvenes, carismáticos, libres de pecados, que sepan comunicarse y atraer a ese segmento de chavos, además que a los tradicionales adultos (y adultos mayores) que tratan de empujar estas iniciativas. Desafortunadamente esto podría llevar mucho tiempo, y solo tenemos 17 meses.
- Se complica esa confianza de los ciudadanos porque dichos empresarios y organizaciones, requieren como vehículo de acción en las próximas elecciones a los partidos políticos, seguramente la institución más desprestigiada en México. Hay que transformarlos o guardar distancia con ellos.