Juan Ángel Ruiz Cantú. Con los pies en el cielo
El 8 de enero de 1994 un accidente marcó un punto de quiebre en la vida de la familia Ruiz Cantú.
A pesar de este batalla inimaginable, todos y cada uno de sus miembros se levantaron, desafiando a la vida y a la muerte con una fuerza que inspiró a toda nuestra comunidad por su ejemplo de amor, lealtad y tenacidad.
Hoy, queridos amigos y familia, nos reunimos con el corazón pesado y las lágrimas en los ojos para despedir a un ser extraordinario, Juan Ángel Ruiz Cantú, un hombre que rompió récords mundiales.
La noticia de su partida nos llena de tristeza, pero también nos impulsa a recordar y celebrar los 30 años de valentía, y perseverancia que Juan Ángel compartió con todos nosotros.
Su cuadriplejia no lo detuvo para generar amor y esperanza a su alrededor y compartir su sentido del humor el cual era constante y contagioso.
No importaba la situación, el siempre tenía un comentario que rompía la tristeza, siempre supo darle un giro con humor a cualquier acontecimiento.
De Juan Ángel se ha dicho absolutamente todo, porque no faltaron las entrevistas ni documentales que contaron a lujo de detalle su historia, su proceso y su legado durante sus 30 años de cuadriplejia.
Sin embargo hoy quiero hablar de los que hicieron que estos 30 años de Juan Ángel fuera una vida llena de posibilidades.
A su padre Ramón, a su madre Juany, sus hermanos Ramón, Gabriela y David quienes fueron el motor, a ellos les debemos que todas las ideas, proyectos y deseos de Juan Ángel fueran realidad.
A ustedes cinco, gracias por donar su tiempo y espacio para que Juan Ángel fuera de todos nosotros y lograr hacer consciencia en nuestra comunidad sobre el abuso del alcohol.
Sin ustedes nada de esto habría sido posible.
Ustedes fueron retados como padres, como hermanos y como familia, y juntos de la mano de Juan Ángel retaron a la vida y a la muerte.
¡Felicidades! son un ejemplo de seres humanos y de familia. Se que el camino no ha sido fácil, pero la unión y el amor venció todos los obstáculos.
Ahora todos desafiaremos el reto de vivir sin él
Su legado de amor como familia trascenderá porque sabemos que hay un libro aún por editar y publicar.
Esta historia aún continúa.
Gracias familia Ruiz Cantú por hacer todo esto posible.
Cabezón: no hay palabras que hoy quisiera escribir que no te haya dicho en vida, solo te digo: - vuela alto, porque esto apenas comienza.
¿Qué se siente tener los pies en el cielo?