Irreverente

Si te piden que votes o hagas algo así por amor, al menos, duda

Plácido DETONA al respecto: Lo más probable es que no tengan nada razonable qué ofrecer.

Les platico esta atrevida, descarada y provocadora historia. ¿Arre?¡ Arre!

El tiempo y la experiencia lo vuelven a uno, cauteloso “diamadre”.

Por eso, cuando escucho a alguien decir que hace algo por amor o que le está echando el corazón, confirmo que la gente se radicaliza porque es mucho más fácil sentir que razonar.

Apelar al “amor” o al “corazón” en cosas de trabajo o de política, es propio de fanáticos, y a esos no los quieren ni en las tribunas, aunque llenen los Estadios.

Meritocracia

Implica  que, vengas de donde vengas, seas quien seas, valdrán más los resultados que das, que tu lista de contactos o relaciones; que tu “marca”, que tu apellido de pedigrí o tus buenas intenciones.

La meritocracia es una poderosa herramienta para eliminar el influyentismo e impulsar la igualdad de oportunidades para todos.

Hoy, pocos funcionarios de cualquier tipo de gobierno podrían conseguir un empleo bien remunerado en empresas privadas. 

¿Por qué será?

¿Algún funcionario de gobierno será capaz de generar riqueza? 

Pfff, de eso, mejor ni hablar.

¿Por qué será?

En materia de política…

Mientras discutamos de ideales ajenos, es muy probable que otros estén robando en nuestro nombre.

La discusión de esta generación sobre políticas públicas, ya no debe ser sobre “izquierdas” o “derechas”, sino sobre pragmatismos o ineficiencias.

Debe ser sobre capacidad de gestión, honestidad, consensos y resultados.

Y esto no es debido a que hayan dejado de existir las “izquierdas” y las “derechas”, sino porque esas ideologías son incapaces de atender las complejas demandas actuales, que requieren menos dogma y más ciencia.

¿Cultura del esfuerzo? ¡Bah! Eso es puro rollo… y barato
  • Yo no premio el esfuerzo de mis equipos. Premio el resultado. 
  • Las buenas intenciones de alguien me valen madre, porque lo que cuentan son los resultados.
  • Nadie vive con el producto de su esfuerzo; todos vivimos de los resultados de ese esfuerzo.

Y esto debe aplicarse a la política.

La productividad equivale a un esfuerzo.

Pero lo que vale es la rentabilidad, que es el resultado obtenido del esfuerzo.

Una sociedad progresa cuando su población premia NO el esfuerzo de sus gobernantes, sino el RESULTADO de ese esfuerzo.

Los mexicanos debemos alejarnos de las ideas dogmáticas ramplonas, que huelen a naftalina, alcanfor y están plagadas de telarañas.

Debemos repeler ideas y costumbres que son el producto de bibliotecas en desuso.

Poder ciudadano 

Está por encima del poder partidista, pues éste corrompe lo que toca y obstaculiza el desarrollo de las comunidades.

Mientras más se ciudadanice un candidato, más posibilidades tiene de ganar elecciones y de triunfar como gobernante.

¿Y el pueblo pobre?

El mayor obstáculo de un pobre para que deje de serlo, no es el empresario ético, sino el político corrupto que vive a expensas de la pobreza, sacrificio e ignorancia del pueblo al que tanto dice que ama y que abraza con el corazón. 

Fango de envidia y resentimiento 

Malo el cuento cuando un gobierno tilda de enemigos a los emprendedores.

Peor aún cuando los sataniza con el mote de aspiracionistas.

Crear “empresas” con dinero público no tiene chiste.

El rol del gobierno NO es hacerle competencia al emprendedor.

El compromiso de los gobernantes es crear condiciones para que florezca el bienestar y éste se logra con seguridad, salud, educación y pan en la mesa.

La mujer

Finalmente, les comparto esto, que no es dogma, sino creencia basada en ciencia:

  • Un hombre no nace, se hace. 
  • A diferencia de la mujer, que nace, no se hace. 

Por eso, mi abuela la alcaldesa me adiestró a ver a la mujer -por definición y convicción- como un ser superior al hombre.

Nace así el respeto sobrehumano que nos merece todo lo que es y provenga de una mujer.

Machos

Escribo lo anterior por aquello de que los militares de alto rango siguen tercos en ver con disgusto que una mujer sea la comandante suprema de las fuerzas armadas.

Escribo esto por la creencia absurda de que a fuerza tiene que haber en México un candidato macho a la presidencia, para un pueblo machista. 

Cajón de sastre:
  • El éxito, el escándalo y el fracaso, tarde o temprano colisionan. 
  • A ti te lo digo, m’ijo, entiéndelo tú, mi nuera.
  • Mañana, cambio completo de programa, sin faltar el Incomparable Iván.
Plácido Garza

Presidente y fundador de la plataforma noticiosa www.detona.com que cuenta con un periódico digital y canales de TV en YouTube y TikTok. Ganador del Premio Nacional de Comunicación para Medios Digitales 2023, otorgado por la “Fundación José Pagés Llergo”. Ganador del Trofeo Regio 2024 en la categoría de Comunicación. Ganador del Premio Estatal de Periodismo en NL,  “Francisco Cerda Muñoz” 2024, al mejor medio digital. Nominado a los Premios de Periodismo “Maria Moors Cabot", de la Universidad de Columbia en Nueva York; "Sociedad Interamericana de Prensa", con sede en Miami y “Nacional de Periodismo”, por cuatro años consecutivos. Miembro de los Consejos de Administración de diversas corporaciones globales.  Creador de la primera plataforma BigData en América Latina.  Exporta información a empresas y gobiernos de varios países.
Es uno de los periodistas más influyentes en el ámbito socio-político de México. Escribe todos los días su columna "Irreverente" para medios nacionales y extranjeros. Maestro de distinguidos comunicadores en el ITESM, la U-ERRE y universidades de EEUU. El 29 de septiembre de 2022, Plácido Garza es incluido en la Enciclopedia de la Literatura en México por su libro “Irreverente”, donde se le destaca en la reseña como “un disparador incansable de ideas, algunas provocadoras, otras, lapidarias”. Es reconocido por su tono fresco y mordaz de crítica política y social, así como una viva expresión de la lengua y la cultura mexicana, mezcla antagónica generada por la proximidad con Estados Unidos. Como montañista, ha conquistado las cumbres más altas de América y algunas de Asia y Europa.