Bukele: ¿el salvador?

José Luis Galván Hdz. DETONA: Entre montañas y volcanes, El Salvador luce hoy una calma casi sobrenatural.

Las calles iluminadas, brillan con un silencio que cientos temieron imposible, y la tranquilidad se paga con la moneda de la pérdida de libertades.

Bajo un manto de seguridad, muchos evitan alzar la voz por miedo a las consecuencias; la sensación de paz coexiste con el rumor de que ya no se permite disentir. 

Al descender del avión, Irvin —mi conductor de taxi— me relató su experiencia en “Villa del Lago”, un barrio otrora dominado por pandillas.

Antes, explica con voz apesadumbrada: “tenía que pagar hasta cinco dólares diarios a los pandilleros solo para llegar a mi casa sin que rompieran los vidrios de mi coche”. 

Todo cambió cuando el gobierno de Bukele declaró “el régimen de excepción”: una medida que suspende garantías constitucionales básicas (como el derecho a un juicio justo y la libertad de reunión) para enfrentar la crisis de seguridad.

Complementario a esto, “el Plan Control Territorial” desplegó a las fuerzas armadas en los barrios más peligrosos, autorizándolas a arrestar a sospechosos con tatuajes “pandilleros” sin orden judicial.

“Entraron de madrugada, se llevaron a todos, culpables e inocentes”, rememora Irvin, “y desde entonces mi familia duerme con menos sobresaltos… pero más con el corazón en un puño”. 

Sin embargo, esta seguridad tiene un costo.

Organizaciones de derechos humanos han documentado detenciones arbitrarias y violaciones al debido proceso.

La libertad de expresión también se ha visto afectada, con periodistas enfrentando restricciones y acoso. 

En el centro de la ciudad, la Biblioteca Nacional, abierta las 24 horas, simboliza el nuevo rostro de El Salvador.

Pero mientras algunos celebran estos avances, otros temen que el poder concentrado en el Ejecutivo y las medidas autoritarias puedan socavar la democracia. 

Al final de mi visita, me quedó una pregunta: ¿Es Bukele el salvador que este país necesitaba, o su liderazgo representa una amenaza para las libertades fundamentales?

La respuesta depende de a quién se le pregunte, pero una cosa es cierta: El Salvador está cambiando, y solo el tiempo dirá hacia dónde se dirige. 
José Luis Galván Hernández

José Luis Galván Hernández es originario de Monterrey, N L. Licenciado en Derecho y Ciencias Jurídicas y estudios de maestría en Letras Españolas, ambos por la Universidad Autónoma de Nuevo León; Máster en Derecho Público por la Universidad de Valencia, en España. Tiene estudios de artes dramáticas en la Escuela de Teatro de la Facultad de Filosofía y Letras, así como en el Centro de Capacitación Artística de Televisa. Ha escrito varias obras de teatro como: “Una Historia en común”, “Desde un Teatro”, “La alegría del querer”, “El Zoológico del futuro”, entre otras. Escritor de la biografía de “Pepe Maiz, su vida hasta extrainnings”. Actor, editorialista, productor de teatro y televisión. Además ha laborado  como funcionario público por más de treinta años en el ámbito cultural, desarrollo humano, entre otros, a nivel municipal, estatal y federal. Fue Diputado en la Legislación LXXIII del H. Congreso de Nuevo León. Desde el año 2009 es editorialista en diversos periódicos reconocidos, tanto en medios digitales como impresos.