La huida de Samuel

Gerson Gómez DETONA aquí: Plata o plomo, idéntico a la época de Rodrigo Medina. Los indicadores demuestran el poderío de las células organizadas...

Confidencial N.L. es la rumorología del acto frecuente. Al norte de México corre la sangre. Siempre lo ha sido. Los grupos criminales presentes en las fuerzas estatales y municipales. En todas se infiltraron.

Usan ocultos en sus uniformes varios aparatos de comunicación. La mayoría de ellos privados. Hacen la labor de halconeo. Informan a sus superiores, fuera de la organización formal del gobierno.

Plata o plomo, idéntico a la época de Rodrigo Medina de la Cruz. Los indicadores demuestran el poderío de las células organizadas. Hemos caído de nuevo en garras del desgobierno.

Cada asesinato, desaparición o carpeta mal integrada, es muestrario de la colusión. Los mandos están rendidos. Voltean para otro lado. Minimizan y le dan legitimidad a las actividades de sus policías.

Samuel Alejandro García Sepúlveda lo sabe. Desconfía, con mucha razón, hasta de la sombra de sus pasos.

El gobernador hace la labor de sus secretarios. Salir en la foto y sonreír. Hablar en pésimo ingles discursos de optimismo del happy problem.

Evita el estado para no salir raspado. Solo se queda cuando hay garantía de las fuerzas federales, de la milicia, los marinos, para resguardar su seguridad.

Deja al desamparo a quienes conocen actos de violencia, robo, cobro de piso, secuestro y ajuste de cuentas, cada momento, más cercano a las colonias residenciales. No solo en los guetos, sino en los fraccionamientos con casetas de vigilancia y buena vecindad.

Samuel debe responder ante el Congreso sus ausencias. Los verdaderos motivos. Decir tengo miedo y no escudarse en inversiones de saliva.

Gerson Gómez

Morelense de cepa Regiomontana. LCC con especialidad periodismo (UANL). Doctor en Artes y Humanidades (I.C.A.H.M.). Tránsfuga de la mesa de redacción en diferentes periódicos como El Diario de Monterrey, Tribuna de Monterrey, y del grupo Reforma en el matutino Metro y vespertino El Sol. Escort de rockeros, cumbiamberos, vallenatos y aprendices al mundo de la farándula. Asiste o asistía regularmente a conciertos, salas de baile, lupanares, premieres, partidos de fútbol y hasta al culto dominical. Le teme al cosmos, al SAT, a la vejez y a la escasez de bebidas etílicas. Practica con regularidad el ghosting. Autor de varios libros de crónica como Hemisferio de las Estaciones, Crónicas Perdidas, Montehell, Turista del Apocalipsis, Monterrey Pop y Prêt-à-porter: crónicas a la medida.