MORENA: Visas y homicidios
Los temas son aparentemente inconexos:
- Retiro de visas del Gobierno de Estados Unidos a gobernantes morenistas como al presidente municipal de Matamoros, Tamaulipas (Jorge Alberto Granados, en abril) y a la Gobernadora de Baja California y su esposo (Marina del Pilar Ávila y Carlos Torres, en mayo).
- Asesinato de alto impacto de dos funcionarios morenistas del gobierno de la CDMX (Ximena Guzmán y José Muñoz) el día 20 de mayo.
No voy a hablar de detalles ni hipótesis sobre esos dos acontecimientos, sino de lo que considero el problema de fondo que establece la conexión entre ellos:
Los funcionarios morenistas y sus colaboradores cercanos participan en gobiernos de un partido político cuya piedra angular ha sido el acceso a financiamiento ilícito de campañas electorales
¿De dónde venía ese dinero? Se ha documentado -periodística y judicialmente- que una parte provenía de recursos públicos, por ejemplo, del mismo presupuesto de sus entidades gobernadas mediante “aportaciones voluntarias” de los empleados públicos.
Por ejemplo, el caso del municipio de Texcoco, Estado de México, a cuya presidenta municipal entre 2013-2015, Delfina Gómez (actual Gobernadora del Edomex), se le acusó de retener un 10% de los salarios de 550 empleados municipales como aportaciones “voluntarias” a Morena.
Al final, el Tribunal Electoral Federal validó en 2022 la sanción monetaria del Instituto Nacional Electoral a MORENA, no a la persona de Delfina.
No era esa la única fuente ni la más importante. Entonces, ¿de dónde venía el dinero?
La respuesta a esa pregunta sigue abierta en México, pero en Estados Unidos autoridades como los Departamentos del Tesoro y el de Justicia han señalado en informes que en las campañas de elecciones generales en México se ha inyectado una cantidad de dinero provenientes del crimen organizado (medida en miles de millones de dólares) en beneficio de los candidatos morenistas principalmente.
¿Qué dejan en el camino al poder los gobernantes de MORENA?
¿Con quienes se aliaron para despejar la ruta a la captura del poder y, una vez ahí instalados, retenerlo lo más que se pueda?
¿Qué compromisos hicieron con empresarios, grandes donantes y el crimen organizado?
Una vez en el ejercicio del poder, ha llegado la hora para los morenistas (como antes llegó para los priistas y panistas) de pagar los apoyos y cumplir los pactos.
A lo largo del camino hacia el poder, los aspirantes morenistas llevaron consigo a sus colaboradores, los más leales e incondicionales, para que ocuparan los cargos de mayor confianza.
Tal vez no estaban esos colaboradores leales plenamente conscientes de las consecuencias de su lealtad política absoluta a sus líderes dispuestos, por otra parte, a hacer cualquier cosa, literalmente, con tal de llegar al poder.
Seguramente, esos colaboradores de toda la vida tenían una motivación genuina, integridad personal a toda prueba y el aliento político de impulsar el cambio político en el país y aportar sus granos de arena para hacer la diferencia.
Lo que no sabían era que trabajaban para líderes deshonestos, fundadores y militantes de un partido político (MORENA) cuyo motor funciona con un combustible nocivo: el financiamiento ilícito de campañas electorales.
Las paradojas de colaboradores honestos que trabajan para gobernantes corruptos serían las siguientes:
- Yo colaboro con Fulanito o Menganita por la transformación de México, pero lo que estoy haciendo, en realidad, es colaborar para el avance de la corrupción en mi país.
- Yo trabajo para el Señor X o la Señora Y porque soy de izquierda, soy progresista, y busco acabar con el antiguo régimen político corrupto y autoritario, pero, en los hechos, estoy trabajando para la creación de un nuevo régimen corrupto y autoritario.
- Yo aporto el esfuerzo y mi persona por una causa que considero justa, pero mi integridad personal, mi vida misma, dependen ahora de la culpa y deshonestidad de la persona a la que entregué de buena fe mi lealtad absoluta.
Las visas y los asesinatos son los efectos de una causa profunda: el financiamiento ilícito de Morena y los compromisos adquiridos por sus gobernantes.
No es “dime con quién andas y te diré quién eres”, sino “dime con quién trabajas y te diré qué te puede pasar”.
¿Qué culpa tienen los seguidores y colaboradores cercanos que pagan con sus vidas las fallas de sus líderes?
- Con asistencia del motor de Inteligencia Artificial Copilot/Microsoft para búsquedas documentales.