SIN CENSURA

¿Por qué es trascendente la visita de CEOs norteamericanos a NL?

Eloy Garza DETONA: La mejor prueba de que un estado fronterizo como Nuevo León es garantía de prosperidad y seguridad es cuando llegan los CEOs del Business Leadership Council; en nuestro caso, de Texas, a proponer inversiones regionales.

Ejemplo contrario es el Southern California Business Leadership Council, que ya no quiso sentarse con el gobierno estatal de Baja California. Allá no hay garantías; aquí, sí. Allá no hay confianza para la inversión extranjera; aquí sí.

Por eso ayer estuvieron los CEOs del Texas Business Leadership Council en Palacio de Cantera.

Y hace unos días vinieron a Nuevo León los alcaldes del Southern Texas Alliance of Cities.

EUA no tiene problemas con Nuevo León, sino al contrario: somos un polo de atracción comercial para nuestros vecinos del norte.

Entonces, ¿cuándo se enturbian las aguas de la buena relación entre México y EUA?

Los motivos son muchos, sabidos y conocidos por todos, pero subrayo uno en especial que se estudia muy poco: cuando el gobierno de EUA primero designa a las grandes bandas criminales de México como grupos terroristas y luego les ofrece inmunidad a algunos grupos delictivos de Sinaloa o de Baja California — y a otros no—, se enturbia la relación. 

O como decía perversamente Benito Juárez: “A unos, justicia y gracia; y a otros, la ley a secas”.

No puede perdonar a unos y condenar a otros.

¿Bajo qué criterios jurídicos?

En suma: o todos terroristas, o todos rabones.

Tampoco se puede decir, como malamente señaló ayer el senador Ricardo Anaya en rueda de prensa, que el gobierno norteamericano ofrece inmunidad a ciertos capos mexicanos a cambio de información de políticos que, casualmente, son adversarios de Ricardo Anaya.

Más bien dan inmunidad y absolución —o reducción de pena— a cambio de bienes y propiedades. 

Cuando se entregan los familiares de un procesado, no llegan con una maleta con ropa, sino con cuentas e inversiones suyas y de sus prestanombres.

La absolución cuesta.

Una docena de drones MQ-9 Reaper o unos cuantos satélites Starlink, de los 7,105 en órbita, cargan más información espía y de inteligencia que un capo que se entrega o es llevado al Tribunal Federal del Distrito Este de Nueva York.

¿Por qué?

Simple: los cárteles han mutado a un esquema de franquicias o células, abandonando la pesada y obsoleta estructura piramidal que concentraba toda la información del comercio ilegal en unas cuantas cabezas.

EUA ya tiene detectados los laboratorios de fentanilo en México y la red de involucrados.

¿Le pasará un fiscal norteamericano esta información confidencial y clasificada a un periodista o influencer mexicano para que se lleve la primicia en redes?

¡Por favor!

El sistema de justicia de EUA es, sin exagerar, el más hermético y blindado del planeta.

Quién nos adelante en México lo que cantará el jilguero en su jaula gringa se está burlando de nosotros. Quien diga que ya sabe lo que soltará un presunto narco en su proceso penal pendiente nos está viendo la cara.

No hay acceso a esa información.

Punto.

Por lo tanto, el único termómetro que sí puede medir la estabilidad y gobernabilidad en una entidad federativa no son las fake news que se difunden como zombies por WhatsApp o X, sino las inversiones extranjeras que quieren instalarse o que ya están produciendo bienes en nuestro estado.

No les demos tregua, pues, a los haters de redes ni a los fatalistas.
Eloy Garza

Es abogado, maestro en Letras por la UNAM y máster en Tecnologías de la Información por la Universidad Oberta de Cataluña. Escribe para diversos medios de comunicación.