Se reduce la población económicamente activa al primer trimestre de este año

Marco Pérez DETONA: La pérdida de empleos en la economía, es otro signo inequívoco de que la economía mexicana ya está en recesión.

La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) que publica el INEGI, muestra el comportamiento y la evolución del mercado laboral, y ofrece datos trimestrales de la informalidad laboral, de la población económicamente activa, la ocupación, la desocupación y la subocupación.

A diferencia de las publicaciones mensuales, el reporte trimestral presenta las estimaciones para cuatro tamaños de localidad a nivel nacional, de las 32 entidades federativas, así como de 39 ciudades auto representadas de interés.

En este reporte del INEGI, con los resultados al primer trimestre de este año, de esta Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) se pone de manifiesto que la población ocupada, a excepción de algunas actividades en el sector servicios, se está reduciendo, comparada con los niveles de ocupación que se tuvieron al primer trimestre del año pasado.

En efecto, la población económicamente activa se redujo en 171,885 personas, donde los hombres perdieron 111,555 empleos, mientras que las mujeres solo perdieron 60,330 empleos.

Es interesante conocer que las actividades económicas que más empleos perdieron, fueron precisamente las del sector primario, agricultura, ganadería, silvicultura, caza y pesca, lo cual corrobora que el dato publicado por el INEGI aseverando que el raquítico crecimiento de solo 0.2% real en el PIB registrado al primer trimestre de este año, se obtuvo 100% gracias al crecimiento reportado en el sector primario, de 8.1% del PIB, es más falso que un billete de $18 pesos.

En efecto, mientras el sector industrial reportó un crecimiento negativo al primer trimestre del año, y el sector terciario no creció, entonces todo el crecimiento lo aportó el campo, cuando trabajó con 7% menos trabajadores, e incluso hubo importantes decrecimientos en cosechas importantes, como el maíz blanco, que redujo su producción.

Toda esta manipulación, para que no se ligaran dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo en la economía, y oficialmente se declarara que ya estamos en recesión.

Sin duda, un insulto al intelecto, y es lamentable que el INEGI haya perdido credibilidad y confianza, y no es la primera vez que manipula datos a favor del Gobierno, ya que en años anteriores, ha presentado datos del deflactor del PIB muy inferior al incremento en los precios al productor, (cuando históricamente tienen un comportamiento similar) para aumentar artificialmente el crecimiento real del PIB, al aplicar al PIB nominal un deflactor menor.

La pérdida de puestos de trabajo en el sector primario, también se presentó en el sector secundario, o la industria, registrando un decrecimiento en su población ocupada, y solo el sector servicios, o terciario, en algunas actividades, aumentó su nivel de empleo, y en total, el sector servicios reportó mayor empleo, pero a tasas muy bajas, inferiores al 1%.

La pérdida de empleos en la economía, es otro signo inequívoco de que la economía mexicana ya está en recesión.

Siguiendo con el análisis de la ENOE, se reporta también que la tasa de condiciones críticas de ocupación, que se integra por personas que por alguna razón no están conformes o satisfechas con su empleo, fue de 33.6%, lo que representa que uno de cada 3 trabajadores quisiera cambiar de empleo, y de hecho lo busca activamente, pero por estar trabajando, no se le considera como desempleado, o desocupado.

De tal suerte, presumir que la tasa de desempleo abierto es históricamente baja, de solo 2.5%, no tiene en realidad mérito alguno, conociendo la tasa de condiciones críticas de empleo y al saber que mientas el sector formal pierde puestos de trabajo, los empleos en la informalidad aumentaron en más de 531 mil.

Es lógico que cuando alguna persona está desempleada, busque algún tipo de actividad que le reporte algún ingreso para comer, y al hacer eso, la encuesta ya no lo registra como desempleado.

En materia de remuneraciones al personal ocupado, predomina la población que gana hasta 1 salario mínimo, y representa el 40.1% del total, y sin considerar a los trabajadores que no declararon nivel de ingreso, este porcentaje aumenta a más del 48%.

Finalmente, la mitad del empleo se encontró en micro negocios, y el 18.4% en negocios pequeños, es decir, casi 7 de cada 10 empleos los genera el auto empleo y los negocios pequeños.

Aumentar la productividad, entonces, no luce como una tarea sencilla, ya que por definición, los negocios pequeños no cuentan con suficiente capital invertido.
Marco Pérez

Economista especialista en finanzas públicas, Socio Director de Econometría Aplicada SC, Conferencista y Catedrático a nivel doctorado.