No me la pegas
Pobre del Estado de México.
Ni Alejandra del Moral, candidata de la coalición de la hidra sin cabeza, ni Delfina Gómez, designada por Andrés Manuel por las siglas de MORENA, llevaran al futuro, progreso y mejoría.
Los debates, esa manera tan superficial, a la usanza del termómetro de popularidad norteamericana, funcionan de cuadriláteros para fajarse con el contrario.
Aplausos. Montones de sonidos de palmas consecutivos. Las presentaciones para exponer sus ideales se transforman en carretadas de lodo, desechos humanos y excremento animal.
Tú la traes. Tú eres más mala. Tú eres más sinvergüenza. Tú tienes roña. Tú vas a voltear el mundo de cabeza.
A pocas semanas de la elección, Delfina o Alejandra, conocen la diferencia de preferencias. Para el proyecto de la 4T es fundamental la victoria. Para la coalición PRIANRD solo temen la estridencia de la paliza.
Coahuila no representa la misma efervescencia. La derrota de Guadiana se gestó al interior de MORENA. El estado de México es el ombligo del servicio público de carrera criminal.
Por ahí han pasado la gran generación de cachorros de la revolución. Presidentes a modo. Cortar las raíces contaminadas del PRI. Los otros partidos de la unión impensable, solo son espectadores.
Aquí va de nuevo. En caída libre. Pocos dormirán. Control de daños. Observar si ya los indecisos se movieron.
Para eso facturan. Caro. Feo. Mentiroso. Para alienar a las contendientes.
En Gobernación ya preparan la jornada electoral. Las tradicionales compras de voluntades.