Ascenso al Límite - Summit Fever / Reino Unido, 2022
Ascenso al Límite es la historia de un alpinista que se queda atorado a merced del violento clima con sus compañeros, afrontando una muerte segura en la montaña Eiger en Suiza.
Leo (Ryan Phillippe) es el clásico personaje torturado por situaciones del pasado, en este caso la hermana que muere (no escalando una montaña sino en un accidente automovilista), y él vive con un eterno “y no hice nada”.
El amigo y entrenador (Freddie Thorpe) le recomienda que, en vez de vivir sentado en una oficina, se vayan ambos a escalar el triple reto de montañas, comenzando por el Matterhorn y terminando en el Mont Blanc, que termina mal a la larga.
Pero los retos deben de seguir y la película salta a una de las montañas más peligrosas, como que es el Eiger en los Alpes Berneses en Suiza.
Como curiosidad, Clint Eastwood filmó en 1975 The Eiger Sanction precisamente en la mencionada montaña. Sí, Eastwood le hizo al alpinista en sus años mozos.
De hecho, se me hizo muy interesante que la película se centraraen el vicio inexplicable del alpinista: la fiebre de la cima que los mueve a subir montañas; no importa el riesgo y no importa si han sido testigos de tragedias, ni siquiera el “caen como moscas” los asusta.
El director Julian Gibley, alpinista consumado de verdad, quiso llevar al límite a sus actores, colocándolos en las montañas, de manera controlada pero la fotografía y los actores están ahí, subiendo por laderas verticales de las peligrosas montañas.
Pero el guion sufre de un presupuesto que al parecer se fue todo a exteriores para filmarlos de manera superlativa y cero intención de hacer contundente la historia que presenta.
Sí, se hace un señalamiento, pero a muchas cosas como la fiebre de la cima, la obsesión del alpinista, de que demasiada gente nada capaz sube las montañas poniendo en riesgo a otras personas, que antes las figuras eran ejemplares montañistas, que el día hoy el que pueda subir, sube sin saber si tiene la capacidad de lidiar con los peligros que puedan afrontar.
Tal cual ya no son alpinistas, son rock stars que buscan patrocinadores, que a su vez los presionan para escalar en situaciones precarias y riesgosas para lograr primeramente auditorio y ventas.
Todo esto se esfuma durante el recorrido de la trama, la cual se hace aburrida y aún con las impresionantes escenas del Eiger, con los alpinistas moviéndose horizontalmente en la cara vertical de la montaña... no se salva mucho que digamos.