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Crece repudio contra nuevos libros de texto

Protestas en Monterrey y otras ciudades del País suben de tono.

Quienes defienden el adoctrinamiento y la ideologización que pretenden los nuevos libros de texto de la SEP, estudiaron -y tienen a sus hijos y nietos- en escuelas privadas.

En los chats que pululan por whatsapp y las redes proliferan quienes se rasgan las vestiduras en la defensa de este intento de la 4T por embaucar a menores de edad en ideologías, usos, costumbres y otras prácticas que se busca llevar a cabo a espaldas de los padres de familia.

En una nueva protesta realizada este domingo 3 de septiembre en Monterrey, representantes de agrupaciones cívicas, empresariales, partidistas y políticas coincidieron en que los nuevos libros de texto están usurpando la función y misión de inculcar valores, que corresponde mayormente a los padres de familia.

Algunos de los asistentes a dicho evento coincidieron en que las protestas que se están masificando en todo el País se deben a la cerrazón del gobierno federal por darles voz a los padres de los educandos.

Marx Arriaga y su compinche venezolano.
"Es muy fácil defender estos libros, teniendo a sus hijos, nietos o bisnietos en escuelas privadas que no tocan los contenidos ideados por Marx Arriaga y su compinche venezolano", expresó Olga Leticia Arrambide, quien fue a la protesta acompañada de su marido y tres de sus hijos.

"La intención del gobierno es muy clara: apoderarse de la formación de los menores de edad, supliendo la formación en ciencias, tecnologías y otras ramas del conocimiento, con ideología barata que ha probado ser un fracaso en países como Cuba, Venezuela, Nicaragua y otros de la férula castrista o chavista", expresó Héctor Leal García, de la Colonia Vidriera.

"El presidente defiende estos libros diciendo que los únicos errores que contienen son ortográficos. Además de que eso es cierto, invaden territorios que corresponden solo a los padres de familia", indició Esthela Mireles, de la Colonia Chapultepec.

"Si no estoy de acuerdo en que a mis hijos les enseñen en las aulas a hablar al revés, a hacer conjuros y supercherías, el mismo presidente me va a perdonar, pero se está metiendo en lo que no le importa", apuntó Helena García Tamariz, de la Colonia Talleres.

"DETONA, dice y estoy de acuerdo: ¿cómo se va a dirigir a sus padres un hijo que fue adoptado por dos personas del mismo sexo? ¿Mamá? ¿Papá?", expresó Federico García Santana, de la Colonia Vivienda Popular.

"¿Y cómo creen ustedes que va a reaccionar un menor de edad cuando -alentado por los contenidos transgénero de los nuevos textos- vea a su ´mamá´ orinando de pie en su casa? Les quieren meter a los niños la agenda 2030 de la ONU, con calzador, pero lo quieren hacer", agregó Guadalupe González Treviño, de la Colonia Obrera.

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