Los futuros posibles después de la Marcha

Borrego dixit
Salvador Borrego, Ph. D.
La lucha por el poder, opus 3-68
XI-12-2022

Todo indica que la Marcha de los Improperios será histórica; que hará que le tiemblen las nalgas y la investidura a AMLO. Ante esta muy probable situación, qué podemos esperar:

1. Lo más improbable, por ser lo que requiere la mayor dosis de inteligencia, es que AMLO anuncie que retira su iniciativa para reformar el INE, y que las cosas se queden como están. Es lo que menos daños le causaría a su mamadota que llama 4T.
2. Lo más probable, como ha ocurrido antes, es que AMLO recrudezca su postura, y en fast track se apruebe la iniciativa en la dócil Cámara de Diputados.
3. Consecuencia de lo anterior, que llegue a la Cámara de Senadores, le aprieten los güevitos a Ricardo Monreal y a otros senadores, y se apruebe la chingadera.
4. Una posibilidad es que Monreal no se doble, y aproveche el Momentum Político (el impulso, en cuanto notoriedad y oportunidad, que una idea o persona tiene en un momento determinado, bajo un contexto determinado), para mandar a la chingada a AMLO y convertirse en El Salvador del INE. En un héroe nacional, que podría enamorar a La Muchacha y motivarla a darle sus patricias nalgas por seis añitos.
5. Claro que Monreal también podría arrugarse, y ante el Momentum referido seguir deshojando la margarita de me quiere AMLO, no me quiere, y como Mamado Nervo, cerrando los ojos, la deje pasar.
6. Por supuesto que un futuro posible, que quiera Dios no se convierta en presente, es que las contradicciones se agudicen y a partir de mañana nos agarremos a chingadazos. Esa concentración prevista para mañana en el zócalo, para hacerle a AMLO una felación colectiva con motivo de su erótico 69 aniversario, pavimenta el camino para una reyerta colectiva que pudiera generar heridos y muertos. Bien harían en posponer esas muestras mamatorias de cariño.

Así las cosas compañeros. Son cosas que podrían ocurrir o no ocurrir; ya veremos qué sucede.

Lo que sí está ya ocurriendo, es que entramos a la parte final del sexenio de AMLO, que es a su vez su viacrucis. Meses de contrates frecuentes entre los sueños y las promesas de campaña, con el desmadre en que sus pendejadas se han traducido.

A final de cuentas compañeros, cada quien tendrá lo que merece, es cuestión de tiempo.

Por lo pronto, nos vemos mañana en la Marcha de Monterrey. Estaremos muy atentos al discurso de José Woldenberg.

Libertad, igualdad, fraternidad y racionalidad.