Nos quieren encerrados y asustados

Hay algo inquietante detrás de la pandemia: decisiones del gobierno sin lógica, ni rumbo claro, como cerrar casi todos los comercios sábado y domingo, incluyendo supermercados ¡y seguir hundiendo a los comerciantes y restauranteros!

¡Un mundo nos vigila!, solía decir don Pedro Ferriz Santa Cruz hace años.  

Sus palabras toman especial relevancia en esta época. A todas luces hay algo inquietante detrás de la pandemia:

Decisiones del gobierno sin lógica, ni rumbo claro,  como cerrar casi todos los comercios sábado y domingo, incluyendo supermercados ¡y seguir hundiendo a los comerciantes y restauranteros! 

Estas medidas a “bote pronto”, sin previa planeación, aunque parezcan simples torpezas, son indicadores de que hay piezas en el rompecabezas del Covid que nada más no encajan. 

Como alguien preguntó: ¿acaso nos querrán sometidos o muertos?

Luego dice Claudia Sheinbaum, jefa del gobierno de la CDMX, que este es un llamado “distinto”, y AMLO declara que la pandemia sigue causando estragos y  mientras no tengamos la vacuna lo mejor es no salir de casa. 

¿Y por qué hace meses decían otra cosa? ¿No será que nos meten más miedo para vender más vacunas?

MIENTRAS TANTO EN EU...

Y si pasamos al extranjero la situación está peor. Basta echar un vistazo a Max News (a cualquier hora) o a Fox News (de 7pm a 10pm) y veremos a detalle el gravísimo asunto del fraude electoral en EU.

Aunque la mayoría de los medios lo callen, lo veten, lo ignoren, y otros hasta coludidos están.

Investigué sobre las grabaciones telefónicas de CNN donde uno de sus directivos, Jeff Zucker, ordenaba a sus empleados manipular la información y hablar solo de temas negativos del gobierno de Trump, sin sacar al aire lo malo de los demócratas, como por ejemplo las supuestas corrupciones del hijo de Joe Biden con los chinos.

No se puede tapar el sol con un dedo.

Lo cierto es que los descubrimientos de la sofisticada tecnología que utilizaron para perpetrar este mega fraude le quitan el aliento a cualquiera.  

Uff!! Ni una película de Hollywood hubiera realizado guion tan maquiavélico sobre cómo se logró violar al sistema electoral más confiable del mundo. Y además convencer a buena parte del planeta que todo marcha bien.

EL BICHO Y LOS CHINOS

Con lo anterior no quiero decir que el coronavirus no sea peligroso, ¡es evidente que lo es! sobre todo para personas enfermas y de bajo sistema inmunológico.  

Pero también hay argumentos para sospechar que su aparición fue parte de todo un plan con los chinos, que incluía hacer a un lado las políticas de Trump quien, entre otras cosas, mantenían fuerte a la economía norteamericana hasta antes de la pandemia.   

Decenas de expertos han soltado sus teorías sobre todo lo que escribo.

Basta leer a la científica argentina Chinda Brandolino  (sus enemigos por cierto la tratan de desvirtuar), o al valiente politólogo, Agustín Laje, o al blogger y periodista Pablo Muñoz Iturrieta.  

Si de mexicanos se trata, Javier Livas ha realizado excelentes análisis sobre el fraude en EU.

El caso es que las numerosas investigaciones de las últimas semanas (y de mucho antes) nos dejan un marco más amplio y claro para entender que detrás de la pandemia hay algo más serio y complejo.

Está en juego la modernidad como sistema y el comienzo del radicalismo post-moderno posado en arenas movedizas, que ha desmantelado a la ética y a la misma naturaleza humana.  

El tema da para mucho más, por ahora, aquí lo dejo, no sin antes decir que llegó el momento de estar atentos, de investigar, de ser activos, responsables.  

Eso, o la mano pachona de la izquierda radical, el mundo que nos vigila, llamado Nuevo Orden Mundial, seguirá llevando a cabo su proyecto sin ninguna resistencia. Y más aún si nos mantienen encerrados y asustados.

Carolina Garza

Carolina Garza es comunicóloga, con Maestría en Ciencias de la Familia; es conferencista y vocera del Frente Nacional por la Familia. Ex Diputada Federal suplente, ex candidata al gobierno de Nuevo León y fundadora de la asociación  “Los Niños Primeros”. Durante muchos años fue editorialista del periódico El Norte y fue diputada local en NL.