SIN CENSURA

¿Cómo afrontar la muerte según Mauricio Fernández?

Eloy Garza DETONA® “Con esta novedad que me cuentas, mejor no hacemos la entrevista”, le digo a Mauricio Fernández.
https://vimeo.com/1121564419
https://vimeo.com/1121264927
https://vimeo.com/1091599378
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Había ido a mi casa a eso de las cinco de la tarde,pero Mauricio acababa de recibir el desalentador diagnóstico.

Avanza su mesotelioma pleural persistente y metódico, no da tregua, gana terreno día tras día, le informan neumólogos y oncólogos que comienza a fallarle un pulmón.

Le pido a técnicos y camarógrafos que se salgan; que nos dejen solos. 

Vendrían días de quimios e inmunoterapia, jaquecas insoportables, un viacrucis, contra lo previsible, no lo veo en shock, refleja más bien una especie de melancolía serena; una introspección relajante. 

“No. A eso vine, vamos a darle”, soy yo el que se sirve un vaso con whisky, no es para menos, ni siquiera pienso en ofrecerle uno. 

“Habrá otras entrevistas después, mejor no abordemos el tema”.

Se lo digo sinceramente, podría explotar la situación; capitalizar la primicia, pero una entrevista no es una sesión de catarsis, no creo en los periodistas como coach de vida; Mauricio tampoco. 

Se ríe Mauricio de Mito, mi xoloitzcuintle, va y viene el perrito, indiferente al invitado, de vez en cuando lo olfatea, esta raza de canes es la única totalmente mexicana, al morir una persona, el xoloizcuintle ayuda al alma del fallecido a cruzar el río del Valle del Mictlán, lo harán contigo sólo si los tratas bien. 

“Acarícialo Mauricio, trátalo bien, no vaya a ser”. Pero no lo acaricia, está meditabundo, ensimismado, los ojos llorosos, acordamos no mencionar el tema de su salud.

Yo cumplo lo pactado. 

Regresan técnicos y camarógrafos, la entrevista corre por vías ordinarias.

Sus planes de gobierno, su legado, La Milarca, el paseo de los Duendes, las veces cuando los cárteles lo habían mandado asesinar, lo de siempre, sabido y concebido. 

Me resigno a tener una entrevista sin sobresaltos, nada más para cumplir, dejo a Mito que entre y salga de la sala, ya está acostumbrado a estos menesteres míos. 

A mitad de la entrevista, como quien sale del marasmo, Mauricio menciona su diagnóstico.

Lo hace con naturalidad, habla de la muerte — ¿la suya? ¿la de quien lee esta columna? ¿la de todo ser humano? — y confiesa que no teme dejar de existir.

Se ríe de amigos suyos que le guardan pavor a la muerte, los muy cobardes, saber morir es aprender a vivir, tener todo preparado para cuando uno ya no esté. 

“Le digo a mis amigos, ¿qué harías si te quedaran apenas unas horas de vida? ¿Visitar a un familiar que ya no has visto? ¿Poner orden en tus pendientes? ¿Reconciliarte con alguien? ¿Y por qué no lo haces ahora que estás vivo? ¿Por qué esperar a tus horas finales?” 

Mauricio repetiría este argumento en varios foros, en varias reuniones con amigos, y se reía burlón, cuando quería era muy burlón. 

Antes de despedirse acaricia a mi xoloitzcuintle, sin duda Mito aceptará cruzarlo por el río del Valle del Mictlán. 

Lo entrevisté varias veces más y platicamos muchas veces más, contestaba muy rápido por WhatsApp. 

Ayer murió Mauricio Fernández Garza, su memoria nos alentará siempre.
https://vimeo.com/1115590494
https://vimeo.com/1115590526
https://vimeo.com/1015118818
Eloy Garza

Es abogado, maestro en Letras por la UNAM y máster en Tecnologías de la Información por la Universidad Oberta de Cataluña. Escribe para diversos medios de comunicación.